Su principal misión era vigilar las fronteras. Ese fue el anuncio que los militares hicieron hace dos años cuando Ecuador compró a Brasil 18 aviones Súper Tucanos.
Esas aeronaves tienen un sistema de navegación por sensores electro-ópticos e infrarrojos y pueden volar en la noche. Sin embargo, este Diario conoció que de toda la flota únicamente ocho están operativos en este momento.
Nueve están paradas en las pistas de Manta y otra se destruyó tras estrellarse en marzo pasado, en esa ciudad (ocurrió mientras dos pilotos realizaban una misión de entrenamiento en un A-29).
La FAE confirmó ayer estos datos. Altos oficiales señalaron que el problema es la falta de repuestos. “Llegaron de Brasil, pero sus componentes como los motores son americanos y el sistema de comunicaciones son alemanes”, señaló un oficial.
La flota costó USD 200 millones, aunque ahora en la Fuerza Aérea se asegura que faltan recursos económicos para adquirir los repuestos. “Estamos haciendo las adquisiciones del caso. Toca subir al portal de compras públicas (las necesidades). Sino hay ganadores debemos comenzar nuevamente”, explicó un uniformado.
¿El contrato no cubre los repuestos? En el denominado Portal Histórico de la Aviación, portavoces de la empresa brasilera que vendió los aviones señalan que “el acuerdo con Ecuador comprende un amplio paquete de soporte logístico integrado y un avanzado sistema de entrenamiento y apoyo técnico a las operaciones”. Luego se indica que aquello “incluye no solamente a la aeronave, sino también a estaciones de apoyo en tierra y un simulador de vuelo”.
¿Desde cuando están parados? El caso se maneja con hermetismo en la FAE. Sin embargo, a inicios de este mes, en las fiestas de Manta volaron cuatro naves.
Lo que sí se supo es que los encargados de esta flota aérea preparan un informe de lo que ocurre y el documento se presentará al presidente Rafael Correa. Esto luego de que desde Carondelet se pidiera información detallada.
Por ahora se desconoce cuándo las naves que se quedaron sin repuestos reiniciarán su operación.
“Hay que esperar a que se adquieran (los equipos que faltan), vengan reparados y luego instalarlos inmediatamente en el país”, señalan los militares.
El ataque a Angostura
Luego del ataque colombiano a Angostura, el 1 de marzo del 2008, las Fuerzas Armadas adquirieron equipos y armamento.
Las más beneficiadas fueron la Fuerza Aérea y la Marina, que en menos de un año adquirieron siete helicópteros tácticos Dhruv, cuatro radares para la frontera norte, seis aviones no tripulados, 14 lanchas de combate, ametralladoras, fusiles… Entre esas adquisiciones, para mejorar el sistema de defensa después de esos hechos, precisamente estaban los Súper Tucano, que sirven para los patrullajes en la selva.
Fue el propio presidente Correa quien reconoció que en la zona entre Ecuador y Colombia operan mafias identificadas con el crimen organizado, narcotráfico, paramilitarismo y las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC). Allí está“el más grave problema de seguridad que tiene el país; es una frontera caliente”, aseguró.
Justamente, el tráfico de armas vulnera las fronteras norte y sur del país. En esos sectores, la Policía identificó puntos por donde se penetran cargamentos ilegales.
En el sur los pasos son por Huaquillas y Macará. En el norte por Esmeraldas (San Lorenzo y Mataje) y Carchi (Chical y Carmelo).
La recuperación del avión
El Súper Tucano accidentado en marzo pasado no se ha repuesto hasta el momento. Tras este hecho, técnicos de la empresa brasileña Embraer llegaron al país, se unieron a la Junta Investigadora de Accidentes de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) y analizaron las causas del siniestro.
“El ministro de Defensa de Brasil (Celso Amorim) me llamó para ofrecer toda la colaboración para la investigación”, sostuvo en ese entonces el ministro ecuatoriano de Defensa, Javier Ponce.
Ayer, en FF.AA., lo único que se dijo sobre esta nave es que “deberá ser repuesta por el seguro”. Una vez recuperado el avión, este comenzará a volar desde Manta. La flota ocupa lo que antes se denominaba Puesto de Operaciones Avanzadas de Estados Unidos (FOL, por sus siglas en inglés).
Dentro del presupuesto militar para este año, para la FAE se fijaron, por ejemplo, USD 19,2 millones para la adquisición de dos radares, USD 6,9 millones para armas, USD 2,5 millones para helicópteros y USD 1,5 para la modernización de los aviones.
En total, se asignaron USD 13,7 millones. Este fortalecimiento militar se produce precisamente cuando la tarea de los soldados también cambia y ahora tienen la orden del Gobierno de combatir, como prioridad, al crimen organizado transnacional.
De hecho, en el informe de gestión presentado por la Jefatura del Comando Conjunto se advierte que para enfrentar a las nuevas amenazas (grupos criminales), Fuerzas Armadas tendría la obligación de preparar al militar y que ello significaba “tener una capacidad de respuesta eficiente para cumplir con su tarea”.
Los inconvenientes
Los aviones no tripulados, comprados para el espionaje y las operaciones contra el narcotráfico en el mar, también tuvieron problemas por falta de repuestos. Realizaban vuelos intermitentes y no continuos.
Las últimas adquisiciones para las FF.AA. se conocieron la semana pasada. Los militares confirmaron que para el Ejército se adquirieron 100 Hummers. Los comandantes dijeron que una parte se destinará a la frontera norte y otra a la ciudad.
Ecuador pretende adquirir camiones y otros vehículos de Rusia por USD 49 millones. Además, se analiza la transferencia de tecnología para helicópteros y la compra de vehículos para la gestión de riesgos por otros USD 30 millones.