Redacción Negocios
Encontrar algo bueno, bonito y barato en un centro comercial es una verdadera aventura para muchos consumidores nacionales. La tarea de caminar, visitar una tienda, probar el producto y comparar precios puede durar horas y hasta días. Todo con el fin de aprovechar las temporadas de saldos, que, como explica la gerenta de Mercadeo del San Luis Shopping, Andrea Flores, son un total de cinco al año.
Y una de esas temporadas está en pleno auge en varios centros comerciales. Por eso, no es difícil encontrar a cientos de compradores que están a la caza de alguna ganga. Y muchos se han transformado en verdaderos expertos en el tema. Carolina Cisneros es una ejecutiva de 36 años que se considera un “as” en la búsqueda de ofertas. “Viví varios años en Europa y aprendí algunos truquitos.
Por ejemplo, tomar todo lo que a primera vista me parece atractivo y llevármelo al probador. Antes, lo veía y, si no me gustaba, lo dejaba en la percha. Pero, a veces, realmente evalúas mejor y ves que es una buena oferta y que no está mal. Pero, cuando regresas, ya alguien se lo llevó”.
Manuela Avellán, de 25 años, también tiene su plan cada vez que ve los letreros de descuentos pegados en las vitrinas. “Empiezo por los descuentos más bajos, a menudo tienen mejores cosas. Y al final dejo los que tienen mayor cantidad de rebaja”.
En estos días, varias tiendas han colocado grandes carteles de ofertas, que van entre el 20% y el 70% de descuentos para su mercadería. Según los vendedores de la tienda Benetton, los descuentos sirven para “terminar con la mercadería de la colección anterior y sacar la nueva”.
Pero, como dice Armando Jervis, un ingeniero de 44 años, “hemos avanzado mucho en temas de moda, pero aún no estamos a nivel de grandes metrópolis, donde las tendencias cambian en cada estación. Aquí todavía se puede vestir actualizado con un saldo de una tienda”.
Según explica Flores, “los descuentos realmente son un atractivo para aquellas temporadas de bajas ventas. Y septiembre es una de ellas, porque la gente está gastada por el ingreso a clases y todo lo que eso conlleva. Prefiere comprar los útiles a ropa. Entonces, se idearon estas estrategias, para que se mantenga la venta y no decaiga. El resultado positivo lo comprobamos porque se mantiene un alto tráfico en el centro comercial y en la venta”.
Para la madre de familia María Fernanda Piñeiros, de 37 años, la temporada de saldos es una ayuda porque se pueden encontrar artículos a menor precio. “Yo me doy una vuelta por todos los almacenes que tienen ofertas porque nunca sé qué sorpresa puedo encontrarme. Lo que sí recomiendo es fijarse en que los descuentos, generalmente, son para pagos en efectivo”.
Andrés Vidal, de 29 años, salió feliz el pasado viernes en su visita a De Prati. “Fue increíble, encontré un jean que en la percha de descuentos en USD 8 y en la etiqueta decía USD 33. Tenía una falla que ni se notaba”.
Pero también hay quienes no se convencen de las bondades de los descuentos. “Rara vez hay cosas que me gustan. En el caso de la ropa, o son extragrandes o son colores pasados de moda”, sentencia fríamente la universitaria Pamela Jarrín.
Algunos consejos de los expertos
Hay que realizar una visita previa antes de que empiecen las temporadas de descuentos. Tener una idea clara de cuáles son los precios antes y cuáles después.
Preguntar a las tiendas preferidas y los centros comerciales por los días de promociones y descuentos. Así podrá ser uno de los primeros en llegar y ver la mercadería. Los mejores productos se venden primero.
Tener efectivo a mano siempre que vaya a comprar en las tiendas que ofrecen descuentos. La rebaja en dinero constante es mayor que en tarjeta de crédito.
Los centros comerciales aseguran que siempre realizan monitoreos de que las rebajas sean cumplidas según lo ofrecido. Además, verifican antes los precios y luego los comparan.
Aunque las rebajas más grandes llaman la atención, generalmente la oferta de productos de ese rango es muy pobre. Identifique bien las perchas de los descuentos y promociones.
Vaya siempre en grupo cuando quiera aprovechar las temporadas de saldos. El trabajo en equipo da mejores resultados y más rápidos a la hora de comprar.