El tránsito vehicular entre la av. Pichincha y la calle Los Ríos fue fluido con el contraflujo. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
La aplicación del primer día de contraflujo en la autopista General Rumiñahui, desde la avenida Simón Bolívar hasta la calle Sodiro, tuvo un doble impacto. Para los moradores que se trasladan desde el valle de Los Chillos, la medida ayudó a reducir los tiempos de viaje; pero hubo complicaciones para quienes circulaban hacia el valle o desde el sur.
Ayer, 27 de noviembre, en la autopista General Rumiñahui, a las 06:00, el tránsito fue fluido. No se generaron trancones. Unos 300 metros antes del peaje (sentido Quito-valle) se ejecutó una reforma vial que permitió a los conductores, que iban hacia el centro norte de la urbe, ingresen en un cuarto carril.
En este trayecto, a diferencia del miércoles anterior cuando se hizo el mismo recorrido, en esta vía considerada rápida se circuló hasta 60 kilómetros por hora. Pero a la altura de Monjas el tránsito se volvió lento en el carril del contraflujo. En los tres carriles convencionales, el panorama fue distinto. Se avanzó sin contratiempos.
En el sector de El Trébol, agentes civiles orientaron a los conductores para que continúen con su recorrido, por la avenida Pichincha y las calles Los Ríos, Chile, Valparaíso y Sodiro. En la Chile y Valparaíso el tránsito fue modificado.
Ambos carriles funcionaron en sentido unidireccional, sur-norte. Esto ayudó a reducir a la mitad el tiempo de viaje entre la autopista General Rumiñahui, a la altura de la av. Simón Bolívar y la calle Sodiro y Gran Colombia. En relación al miércoles pasado, a la misma hora, se pasó de 60 minutos a 32.
Sin embargo, este flujo preferencial para los conductores del valle generó malestar entre las personas que iban rumbo a la Tola Baja, La Marín o hacia la avenida Velasco Ibarra.
En la intersección de la calle Don Bosco y Valparaíso se reflejó la otra realidad de la aplicación del contraflujo. Los conductores que iban al sur o centro no podían tomar el tramo de la Valparaíso ni la Chile.
Patricia Acosta, moradora del valle de Los Chillos, quien circuló ayer por el contraflujo, comentó que la medida benefició solo a la gente que utiliza la autopista General Rumiñahui.
Ella llegó antes de la hora acostumbrada al Colegio Don Bosco, donde estudia su hijo. Antes de implementar este plan se hacía hasta 50 minutos entre el puente 1 y La Tola. Ayer se hizo media hora.
El personal de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) que estaba en este punto informaba a los conductores que deben tomar rutas alternas, mientras dure la medida.
Quienes se dirigían hacia el sur estacionaron los vehículos cerca del plantel para avanzar una vez que termine el contraflujo. Otros intentaron cruzar sin éxito la calle. El sonido de las bocinas era constante. Hubo conductores que discutieron con los uniformados. “¡Necesito ir a La Tola!, ¡Esta decisión es torpe!”.
Para Iván Pila, conductor de una buseta de recorrido que se estacionó en la Don Bosco, dijo que se debió difundir con anticipación que el tránsito vehicular se modificaría en este sector. En este caso, su asistente fue a buscar a los menores en sus casas. La furgoneta esperó en la esquina del Don Bosco. “Llevo media hora de retraso”, comentó el conductor.
Cristina Montoya, otra moradora que iba hacia el sur, mencionó que la medida le tomó por sorpresa. Ayer fue imposible tomar un bus en este sector. Por eso optó por caminar hacia la avenida Pichincha para volver a su casa.
En El Trébol, donde confluyen los conductores que vienen desde el sur, norte y valle de Los Chillos, también hubo complicaciones.
En uno de los intercambiadores de El Trébol se cambió el sentido del tránsito. Los conductores que venían desde la Napo hacia la Velasco Ibarra, valle de Los Chillos o La Marín tuvieron complicaciones. Tenían que maniobrar para llegar a su destino. En la zona funcionaba el contraflujo y era complicado avanzar.
En esta zona, las quejas de los usuarios de transporte público fueron recurrentes. No sabían dónde tomar los buses. Las paradas se modificaron.
La AMT informó que la medida está en fase de pruebas. Se pulirán las fallas. Hoy se aplicará más tarde la medida, de 06:45 a 07:45. Se contará con más personal y no se modificará el tránsito en El Trébol. En la tarde, de 18:00 a 19:00, aún no hay modificaciones.
En contexto
La actual administración municipal presentó, el martes pasado, un plan para mitigar la congestión vehicular en diciembre. Ayer se implementó una de las primeras medidas que facilitará el tránsito entre el valle de Los Chillos hacia el hipercentro de la urbe.