Técnicos de una empresa
revisan los daños viales. Foto: Washington Benalcázar/ EL COMERCIO
El daño en un tramo de la vía férrea de la Ruta de la Libertad, que une a Otavalo con Ibarra, en Imbabura, no afectó del todo las operaciones turísticas.
Ferrocarriles del Ecuador Empresa Pública (FEEP) hizo ajustes para no alterar la permanente demanda de los viajeros del tren, explicó Mayra Maya, gerenta de la filial Norte.
La solución fue recoger a los pasajeros en la estación de Otavalo y transportarlos en un bus hasta la estación San Roque, situada después del punto averiado. Desde ahí continúa la aventura hasta Ibarra, ubicada a 27 km de Otavalo, o hasta la parroquia de Salinas, a 30 km de la capital de Imbabura.
Con ello se continúa brindando servicio de jueves a domingo y feriados.
“Este es uno de los principales atractivos de la ‘Provincia de los Lagos’”, asegura Fausto Giraldo, subdirector de Turismo de la Prefectura.
Por este corredor ferroviario se movilizaron 19 600 personas durante el 2016. De ellas, el 85% fueron turistas nacionales y el resto extranjeros, comenta Maya.
El recorrido ofrece paisajes de la geografía andina, en el que resaltan los volcanes Imbabura y Cotacachi. Luego finaliza con una topografía agreste y seca.
Hasta el momento, los rieles del ferrocarril continúan colgados en un tramo de aproximadamente 30 metros de longitud y 50 de alto en la parroquia de San Roque, cantón Antonio Ante, en Imbabura.
La fuerte lluvia del 19 de abril habría producido un represamiento de una quebrada y la destrucción de una alcantarilla, que cruzaba por debajo de la vía férrea.
Matilde Díaz, moradora del barrio La Esperanza, vecina del tramo afectado, recuerda que a las 02:00 escuchó un fuerte estruendo. Era el agua acumulada de la quebrada El Artezón que se llevó la mesa de la vía del ferrocarril, tras las precipitaciones que duraron toda la noche, asegura.
Minutos antes, Díaz y su esposo salieron de la casa. Estaban asustados porque el agua inundó la vivienda.
Junto a la vía del ferrocarril se concentraron otros moradores del sector, como Jesús Calderón, que miraban asombrados cómo la quebrada, que la mayor parte del año está seca, parecía una laguna.
Para la reparación de la vía férrea se hará un análisis de la destrucción de 30 metros de la plataforma, explicó Israel Peña, subsecretario de Infraestructura de esa institución.
Por eso, aún no se conocen plazos ni montos económicos que demandará la restauración del tramo averiado.
Sin embargo, Díaz y Calderón consideran que no se ha tomado en cuenta la opinión de los vecinos que también se sienten afectados, por la falta de un camino de acceso.
Comentan, por ejemplo, que los moradores de Agualongo de Paredes, que tienen sus casas junto a la vía férrea, ahora no tiene por donde transitar porque no hay otra alternativa. Ellos entraban y salían de su barrio por un costado del camino del tren.
Los moradores aseguran que tampoco se ha hablado del canal de agua de riego que desapareció. Díaz considera que el problema se generó por falta de mantenimiento de las quebradas y alcantarillas.
Ella cree que meses antes de que se inicie la temporada lluviosa se habrían acumulado desechos y troncos de árboles que se talan. “La gente tiene la mala costumbre de lanzar todos los desperdicios a las quebradas”.
La ruta férrea no fue la única afectada por el temporal lluvioso. También, hubo problemas en las líneas de conducción de agua potable de Ibarra y de Antonio Ante y en los cables de fibra óptica de las empresas Claro y Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), instaladas en la parte inferior de la vía férrea.
Los técnicos de las empresas de agua apuntalaron las tuberías con troncos de árboles, que consiguieron en un bosque cercano, para reanudar el servicio. Entre tanto, las labores de reparación de la alcantarilla aún no empiezan.
La semana pasada, representantes de las entidades que tienen instalaciones afectadas se reunieron en el Municipio de Antonio Ante para buscar una solución en conjunto.
Entre otras cosas se acordó que cada empresa realice estudios técnicos minuciosos, informó el Cabildo en un comunicado.