Moscú, DPA
El presidente ruso, Dmitri Medvedev, aprobó hoy una ley publicada en la página web del mandatario que introduce el arresto domiciliario para aliviar la situación en las abarrotadas cárceles rusas y humanizar el cumplimiento de las penas.
En adelante las penas de cárcel de hasta cuatro años serán sustituidas preferentemente por la libertad bajo vigilancia, según reza la ley. Este tipo de pena atenuada que se aplica también en otros países está pensado por ejemplo para convictos por delitos económicos.
Medios en Moscú informaron de que se emplearán dispositivos electrónicos adosados a los pies y pulseras con localizadores. De acuerdo con el Ministerio ruso de Justicia, Rusia prepara una exhaustiva reforma de los centros penitenciarios. El Ministerio admitió recientemente que las condiciones en las cárceles todavía son tan inhumanas como en tiempos del dictador soviético Josef Stalin.
El presidente Medvedev, jurista de profesión, había prometido humanizar los centros penitenciarios rusos. La nueva ley permite el uso de “medios audiovisuales, electrónicos y de otro tipo para la vigilancia y el control” de los condenados.
Según medios rusos, una prueba con pulseras y dispositivos para los pies en reos dio resultados positivos. Rusia por lo visto recibió tres millones de euros (4,3 millones de dólares) de la Unión Europea para la introducción de penas alternativas, aseguraron los medios.
Con ese dinero se compraron los dispositivos de seguridad. El Estado ruso espera ahorrar así ingentes sumas de dinero mediante la vigilancia de los delincuentes en sus viviendas, ya que el internamiento en prisiones supone un coste cuatro veces superior para las arcas públicas. Además, los condenados serán integrados de este modo en sus redes sociales.