Con su maleta, llena de pinceles y colores, cada sábado, la maquillista Loli Ponce va de una casa a otra para embellecer los rostros de las novias en el día de su boda.
Pero en ciertas ocasiones sus brochas y pinturas son sus cómplices para crear verdaderos sustos, mediante el maquillaje de caracterización.
“Es algo totalmente diferente. Su objetivo no es embellecer sino crear personajes, puede incluso ser algo tétrico, pero es divertidísimo hacerlo; me encanta”, explica Loli.
Se utiliza el maquillaje de caracterización para el teatro, para cine y televisión o para realizar producciones de fotografía publicitaria, sin embargo, en nuestro país no existe una demanda laboral en esta área. “Lamentablemente es difícil aplicar este trabajo en el Ecuador, en ocasiones me han pedido que participe en alguna producción teatral, pero como los recursos son limitados y los materiales y el procedimiento son costosos, el presupuesto no alcanza”, afirma.
Entre los distintos tipos de caracterizaciones que realiza Loli están la creación de heridas, quemados, calvas, envejecimiento, maquillajes de personajes de fantasía, y también es posible eliminar las cejas, para crear rasgos distintos, de acuerdo con el personaje.
En esta ocasión, Loli creó quemaduras y una especie de orificio en la piel. “Para realizar la quemadura de un lado del rostro, apliqué un producto que es como una gelatina y después de esperar que se seque, se deben colocar distintos colores, mediante brochas, pinceles y esponjas. Además, se utiliza sangre falsa espesa y una que es más líquida”, dice Loli, quien también enfatiza que lo más interesante del maquillaje de caracterización es que demanda creatividad, intuición e improvisación para crear personajes únicos.
Para hacer la gran herida redonda de la mejilla, se pone una pega especial para la piel, se añade látex, se aplica maquillajes de colores hasta lograr la apariencia deseada y sobre el orificio se coloca sangre falsa, espesa y líquida para que chorree. Loli dispone de variadísimos instrumentos y materiales, uno de ellas es una rueda con distintos tonos que se utiliza para crear moretones y hematomas.
Una artista del maquillaje
Loli Ponce tiene 32 años y se dedica al maquillaje desde hace seis. Después de haber estudiado administración y mercadeo, decidió seguir su verdadera vocación y viajó a Milán, Italia, donde estudió maquillaje embellecedor. Más adelante fue a Argentina para aprender las técnicas de maquillaje de caracterización y, de vuelta al Ecuador, se desempeña como maquillista profesional para novias, para televisión y para fotografía.
“Me dedico 100% al maquillaje y por suerte he podido vivir de esto. A mí me ha ido superbién, porque a la gente le ha gustado mucho mi trabajo y los fotógrafos y los clientes me siguen llamando, por lo que no necesito invertir mucho en publicidad”, comenta Ponce. El día en que está más ocupada es el sábado, al punto de que ha maquillado hasta nueve novias en un solo día. Los costos de sus servicios pueden variar, pero normalmente un maquillaje de novia tiene un precio de USD 45, al igual que la prueba.
El maquillaje de caracterización es mucho más costoso, según explica Loli, debido a que demanda mucho más tiempo y esfuerzo y los productos son también más costosos.