Entérese cómo debe cuidar su piel durante cada etapa de su vida, para procurar que siempre se mantenga saludable y bella.
Entre los 20 y los 30 años
Uno de los principales problemas en esta década es el acné, muchas veces causado cuando se han usado productos deshidratantes que despojan a la piel de sus humectantes naturales, ocasionando que las glándulas sebáceas produzcan grasa en exceso, formando granitos. Por tanto, lo recomendable es usar productos suaves y enfocarse en la prevención de los daños que puedan ocurrir. Para la limpieza, si tiene una piel normal, debe lavarla antes de acostarse con un limpiador delicado (en gel, para pieles grasas y en crema para la piel seca). Para la humectación es indispensable que la loción hidratante cuente con un filtro solar factor 15 ó 20 y que le proteja de los rayos UVA y UVB. En la noche, utilice una loción hidratante sin grasa. También se recomienda comenzar a usar retinoides (derivados de la vitamina A que reducen el aparecimiento de líneas de expresión, estimulan la producción de colágeno y evitan el acné).
Cuando llegan los 30…
Probablemente comenzará a notar que aparecen delgadas líneas de expresión. Además, la piel se vuelve más delgada, se produce una pérdida de colágeno y la renovación celular es más lenta, haciendo que el cutis pierda su brillo. Por esta razón, es importante exfoliar la piel. Para lograrlo, la aplicación de retinoides en la noche puede ser suficiente; de lo contrario, se puede agregar también una crema, un limpiador o un humectante que tenga ácido salicílico o glicólico. En la mañana se debe realizar una limpieza con productos que posean elementos exfoliantes como los alfahidroxiácidos (AHAs); mientras que en la noche se debe utilizar una crema limpiadora. La loción hidratante debe contener antioxidantes como el té verde o vitamina C, que protegerá la piel del daño causado por los radicales libres. También se debe comenzar a usar una crema de ojos para el día.
Durante los 40…
El daño solar comienza a aparecer en esta década, en forma de enrojecimiento y puntos rojos. Además, la piel a esta edad continúa perdiendo colágeno y elasticidad. Para la limpieza del rostro en la mañana y en la noche prefiera un producto cremoso. La humectación debe complementarse con un par de cremas o sérum que contengan al menos dos tipos de antioxidantes. Utilícelos de forma alternada, uno cada día.
Para combatir la resequedad, utilice una crema humectante rica en ácido hialurónico, manteca de karité u otros lubricantes. A esta edad, el tratamiento nocturno debe incluir necesariamente una aplicación de retinoides, ya que reduce las manchas, incrementa la exfoliación natural de la piel, estimula la producción de colágeno, engrosa la epidermis y puede detener el daño solar precanceroso.
A partir de los 50…
Debido a que la renovación celular es muy lenta, el cambio más significativo que notará en su cutis es la resequedad y la pérdida de elasticidad.
Además, las líneas de expresión son más profundas, especialmente en la nariz y las mejillas, y es común que aparezcan las telangiectasias (arañitas), así como las manchas producidas por el paso del tiempo y por los efectos del sol. Para tratarlos, existen diferentes terapias, como el láser de Fraxel que reduce la hiperpigmentación y el de Elio que actúa sobre las manchas rojas. Por otro lado, la menopausia conlleva múltiples problemas para la piel, como una extrema resequedad, acné y rosácea. En esta etapa la limpieza se debe realizar con un sustituto del jabón.
Mientras que para hidratar es necesario aplicar un sérum que contenga un antioxidante cuando su rostro aún esté húmedo. Después utilice un humectante con filtro solar. En la noche, se debe mantener la aplicación de retinoides.