Arturo Escala, funcionario del Ministerio de Justicia y DD.HH., fue encargado, desde ayer, como director nacional de Rehabilitación Social, tras la sorpresiva dimisión de Romeo Silva.
Antes de dejar el despacho, Silva dijo que presentó su carta de renuncia, ayer, en atención al pedido que hiciera el 20 de marzo el presidente de la República, Rafael Correa. Durante el enlace sabatino, Correa solicitó a los ministros que pusieran sus cargos a disposición para que el buró de País hiciera los “cambios necesarios” en el Gabinete.
Silva agradeció ayer al Presidente y al fiscal general del Estado, Washington Pesántez, por la “oportunidad que le brindaron para servir a la sociedad”. Lo hizo durante una rueda de prensa convocada ayer, a las 17:00, en la Dirección de Rehabilitación. Silva habló por 90 segundos y se marchó sin responder a las interrogantes de los periodistas.
En el Ministerio de Justicia se dijo que el nuevo titular de la institución, que se encarga de administrar las prisiones del país, será nombrado a través de un concurso de merecimiento y oposición. La fuente aseguró que el proceso está en marcha.