La erupción volcánica había arrastrado millones de metros cúbicos de lahares, flujos piroclásticos y escombros. Foto: Cortesía Municipio de Morona
Los escombros y flujos de lodo y piedras, generados por la erupción del volcán Sangay, descendieron por el río Upano, la noche del viernes 20 de diciembre del 2019.
Este peligroso represamiento, en el cantón Morona, provincia de Morona Santiago, puso en alerta a las familias que habitaban en la zona adyacente, por lo que fueron evacuadas.
Este material volcánico se había represado en la confluencia de los ríos Volcán y Upano, a unos 90 minutos aguas arriba de la ciudad de Macas, capital de Morona. Para llegar a esa zona se recorre una hora en vehículo y luego se camina 30 minutos entre la vegetación, por senderos sinuosos y lodazales.
Personas que se encontraban cerca de la creciente fueron evacuadas. Foto: Cortesía Municipio de Morona
La erupción volcánica de la última semana había arrastrado millones de metros cúbicos de flujos piroclásticos y escombros (palizadas, piedras, troncos) que se habían acumulado en el sitio. No se conocía con exactitud el volumen del material.
De acuerdo con los reportes técnicos del Municipio ese dique se rompió en la noche por la misma presión de las aguas de los dos afluentes. Hubo un estruendo que alertó a las familias que viven en covachas. Tras esa liberación de material los caudales empezaron a normalizarse.
25 personas -entre niños, mujeres y adultos- que vivían muy cerca de esa creciente fueron evacuadas ante el inminente riesgo y para precautelar su seguridad, dijo el alcalde de Morona, Franklin Galarza.
Tras la liberación de material piroplástico, los caudales empezaron a normalizarse. Foto: Cortesía Municipio de Morona
A las 05:30 de este sábado 21 de diciembre, los representantes del Comité de Operaciones de Emergencia se trasladaron a la zona para verificar cómo quedó el lugar y tomar las medidas correctivas. Por ahora las familias no podrán retornar a la zona.
De acuerdo con los registros históricos, el volcán Sangay mantiene su actividad eruptiva desde 1628 y se reactiva cada cierto tiempo. La última activación empezó el 7 de mayo del 2019. Este coloso posee tres cráteres y limita al norte y sur con los ríos Sangay y Volcán.
Los centros poblados más cercanos están asentados en las planicies oriental a unos 30 kilómetros y corresponde a los cantones Morona, Palora, Huamboya y Pablo Sexto.