En el día de su cumpleaños número 47, Rafael Correa hizo un espacio en su agenda para recibir la visita de Arturo Valenzuela.El alto diplomático estadounidense se reunió el lunes con el canciller ecuatoriano, mantuvo agenda privada con diferentes sectores y pulsó temas que son de interés de la relación Ecuador -Estados Unidos, desde la perspectiva del país del norte.En la reunión con el Presidente tocó cuatro temas: la relación de nuestro país con Irán, lo atinente a la libertad de expresión, la relación comercial y una hipotética cita de Correa con Obama como presidente pro témpore de Unasur.A Washington le preocupa la relación de nuestro país con Irán. La nación islámica trabaja en un programa nuclear que llama la atención de distintos países e inobserva las recomendaciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El Presidente manifestó la postura de tener relaciones de amistad con todos los países y la conveniencia de venderle banano a Irán.Punto inquietante para el funcionario norteamericano fue el que tiene que ver con la tensa relación con la prensa. Valenzuela dijo a Correa que es vital que los medios sean voz de la minoría, que hay que respetar. El Presidente se reafirmó: la prensa es el mecanismo de los opositores que perdieron las elecciones y buscan desestabilizarlo.En materia comercial, el Gobierno ecuatoriano dejó sentada una postura sobre el tratado de preferencias arancelarias. (Atpdea): que no se renueve cada año sino que se mantenga al menos tres. Una tesis sustentada en la lucha contra las drogas y que sostienen los sectores productivos.La posible reunión de Correa como presidente de Unasur y Obama depende de reuniones previas para preparar una agenda. Correa en la Casa Blanca es algo aún lejano.