Milton Luna, ministro de Educación (i), Josette Arévalo, directora de Ineval (c) y Alfredo Astorga, viceministro de Educación, en la presentación de los resultados PISA -D. Foto: Cortesía Ministerio de Educación
Pese a que los resultados de Ecuador en las pruebas PISA-D o PISA para el Desarrollo son ‘alentadores’, aún se deben superar retos y reducir brechas en educación. Esta conclusión es parte de los resultados de la evaluación internacional aplicada en el 2017.
La prueba del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) se tomó a 6 100 estudiantes ecuatorianos de 15 años. Se evaluaron habilidades en tres áreas: Ciencias, Lectura y Matemáticas.
Ecuador, por ejemplo, se encuentra en la media del promedio de América Latina y de PISA-D, según los resultados.
En el área de lectura, el promedio en PISA-D fue 346 puntos, mientras en América Latina y el Caribe llegó a 406. El país obtuvo 409, es decir, se acercó al desempeño de estudiantes de países de ingreso medio-alto, según el informe.
¿Cuál fue el nivel de lectura que alcanzaron los alumnos? A pesar de estar en la media, ellos llegaron al nivel dos de los seis establecidos (uno es el más bajo). Es decir, son capaces de ver información y reconocer la idea principal, comprender relaciones o interpretar su significado de forma básica.
Las niñas tienen una mayor comprensión lectora que los niños, con ocho puntos más.
Una situación similar se observa en el área de Ciencias, donde los evaluados obtuvieron 399 puntos. Si se compara con el promedio de América Latina, Ecuador tiene un punto más. Pero si se lo hace con el de PISA-D está a 50 puntos arriba.
Así, los estudiantes ecuatorianos se ubicaron en el primer nivel de la escala, que implica que son capaces de emplear conocimientos básicos.
El área en que tienen más inconvenientes es Matemáticas, donde obtuvieron 377 puntos, es decir, 53 puntos más en PISA-D y a dos de América Latina. Sin embargo, en esta área hay brechas más grandes.
El 70,9% de chicos no alcanzó un nivel dos o básico para resolver problemas matemáticos. Los estudiantes hombres tienen 20 puntos más que las niñas. La diferencia es equivalente a un año de escolaridad.
Ahora, si se compara los resultados del Ecuador con los países que tienen un nivel alto en educación se concluye que aún hay un largo camino.
Por ejemplo, el promedio de la evaluación general PISA, en Ciencias y en Lectura es de 493 y en Matemáticas es de 490. Es decir, Ecuador está por debajo de esos niveles.
Para el ministro de Educación, Milton Luna, los resultados de la evaluación internacional fueron los esperados.
“Hay problemas estructurales serios en la educación ecuatoriana e incluso en los esfuerzos que se realizaron en los últimos 10 años, con tanta cantidad de recursos, hay algo en lo que se equivocaron y tenemos que rectificar”.
En ese sentido, el titular de la Cartera de Estado mencionó que están alentando a la creación de otros instrumentos de evaluación para valorar otros aspectos del proceso educativo. “Vamos a evaluar la evaluación”, dijo Luna, sin precisar a qué se refería.
La participación en PISA y en las pruebas del Laboratorio de la Unesco son importantes, para Harvey Sánchez, extitular del Instituto Nacional de Evaluación (Ineval).
Para él, los resultados de Ecuador en esta sesión de PISA-D son “consistentes” con los obtenidos en el 2014, en el Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo de la Unesco (Terce).
Entonces, señala, Ecuador dejó de estar en el grupo de países con el peor desempeño para pasar al del grupo medio.
Para leer los resultados hay que tomar en cuenta que “estamos bastante mejor que todos los otros países que participaron en esta prueba”, pero “no se puede comparar con otros como Finlandia o Singapur, que tienen otros niveles económicos y de desarrollo”.
Lo dice Sánchez, quien ahora se desempeña como uno de los cuatro consejeros técnicos de alto nivel del Laboratorio de Evaluación de la Unesco. Y preside la Agencia Latinoamericana de la Evaluación.
Ecuador tramitó, por primera vez, su ingreso al programa desde el 2014. Y empezó por PISA-D, que es un paso intermedio. Para ello se han dado una serie de acciones como la validación y ajustes a la muestra y se tomó una prueba piloto. Este proceso se hace para evaluar las dificultades de la prueba. Lo explicó Josette Arévalo, directora del Instituto Nacional de Evaluación.
La prueba piloto se realizó a 2 200 estudiantes de 50 planteles. Mientras que en la aplicación oficial participaron chicos de 170 planteles educativos públicos y privados.
En octubre del 2021, los estudiantes de Ecuador rendirán una nueva prueba, esta vez con más de 70 países. Los resultados se conocerán en el 2022.
¿Cómo usar los resultados? Sánchez dice que las bases de datos permitirán que el Ministerio pueda comparar por ejemplo si a una escuela, en la misma zona y con las mismas condiciones socioeconómicas, le fue mejor que a otra. Y también mirar factores asociados al aprendizaje.
Entre otras cosas se puede observar que la repetición de un año lectivo y la permanencia de los chicos en el sistema son dos indicadores ecuatorianos que destacan en la PISA-D.
Además, la mayoría de los chicos están en el año escolar que les corresponde, según su edad. El porcentaje de estudiantes que han repetido el año en Ecuador es menor al promedio de América y el Caribe. En el país es de 18% y en el resto de países llega al 29,3% de los estudiantes.