Los bomberos colocaron escaleras gigantes para llevar al piso alto. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
La Zona Rosa de Guayaquil se alteró esta tarde y no por el ambiente de farra entre las discotecas del céntrico lugar. A las 15:30 de este lunes 2 de septiembre de 2019 se reportó un incendio en las calles Rocafuerte y General Manuel de Luzárraga, en el centro de la urbe porteña.
Más de diez unidades del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil atravesaron las congestionadas calles del casco comercial de la ciudad para llegar al edificio en llamas. También acudieron los agentes de la Policía Nacional a la emergencia, que se reportó en el cuarto piso de la edificación.
Los bomberos colocaron escaleras gigantes para llegar al piso alto. En tanto, los ocupantes de piezas y departamentos evacuaron. El fuego comenzó, aparentemente, por el cortocircuito en un televisor en la vivienda de una mujer. El incendio la sorprendió en el momento en que iba a ducharse.
Dos vecinos la convencieron de salir del departamento porque corría peligro y la ayudaron a bajar del edificio. Pero, la señora de 57 años, se negaba a abandonar a sus cuatro mascotas. “La mujer no quería salir porque sus gatos estaban atrapados. Tuvimos que sacarla”, dijo Walter Seminario.
Durante una hora los habitantes del edificio permanecieron afuera del inmueble hasta que los bomberos terminaran de apagar las llamas. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Los bomberos controlaron el fuego. Luego ingresaron al departamento para identificar las causas del flagelo. También localizaron a los cuatro gatos de la mujer y los rescataron. No sufrieron quemaduras.
Los bomberos los envolvieron en sábanas y se los entregaron a la dueña. En los bajos del edificio, ella recibía atención de los paramédicos para estabilizar su presión arterial luego del susto.
El mayor Medardo Silva, jefe de la Segunda Brigada del Cuerpo de Bomberos, manifestó que la emergencia fue controlada a tiempo y no se registraron personas heridas. En el incendio solo se afectó el departamento de la mujer.
Durante una hora, los habitantes del edificio permanecieron afuera del inmueble hasta que los bomberos terminaran de apagar las llamas. La calle Rocafuerte, por donde circula el servicio de transporte Metrovía, fue cerrada durante más de una hora.
Paola Albán, hija de la mujer rescatada, recibió la llamada de una persona que le informó que su madre estaba en el interior del departamento. “Al parecer, el cortocircuito llegó hasta la cama y fue ahí que se expandió el fuego. Mi mamá estaba nerviosa y pudo salir gracias a los vecinos”, dijo.