Los soldados recibieron los automotores valorados en USD 80 millones en la Brigada Huancavilca, un recinto militar que opera en el norte de Guayaquil. Foto: EL COMERCIO
Las volquetas, cabezales, camionetas tipo mula… formaron una hilera y fueron expuestas en la Brigada Huancavilca, un recinto militar que opera en el norte de Guayaquil. Son 709 vehículos y el Gobierno dice que es la entrega “más grande de la historia militar”. Los soldados se colocaron junto a los automotores y frente a ellos habló el presidente Rafael Correa.
Así llegó uno de los primeros pedidos: no dejarse llevar por quienes en algún momento pretendan organizar una insubordinación como la ocurrida el 30 de septiembre del 2010.
El pasado 25 de enero, cuando se recordaron los 20 años de la guerra del Cenepa, el Jefe de Estado ya cuestionó a quienes supuestamente creaban rumores. Ese día dijo estar cansado de aclarar que el Issfa no desaparecerá y que la entidad militar no cerrará su puertas.
Y ayer hizo más anuncios, pues dijo que respaldará como “ningún otro régimen” la labor de Fuerzas Armadas. Según datos oficiales, en el 2014 la institución recibió USD 1 974 millones.
Cuando habló a los militares, Correa fue reiterativo al citar otras obras emprendidas por su gobierno en materia social y económica, entre ellas la construcción de escuelas del Milenio y de hospitales.
Con este argumento, el Presidente comparó los 80 millones invertidos en los 709 vehículos entregados ayer y lo catalogó como un “sacrificio que deben agradecer al pueblo ecuatoriano”. “De este año difícil saldremos fortalecidos y con un mayor espíritu nacional”.
Los salarios militares
Las visitas a los militares han sido frecuentes y las autoridades dicen que la idea es desmentir “rumores y pasquines”. Hace 19 días, por ejemplo, el Comando Conjunto difundió un comunicado y dijo que no se reducirán los salarios de los militares. La aclaración se debió “al documento que circuló el día 19 de marzo del 2015 y que malintencionadamente se toma el nombre del ministro de Defensa, Fernando Cordero, disponiendo una falsa reducción de salarios al personal militar”.
14 días antes, el ministro de Defensa, Fernando Cordero, se reunió con 3 500 militares que llegaron al coliseo de la Espe.
Allí insistió en que el Issfa no desaparecerá e informó sobre la cesantía militar. Al finalizar, el funcionario indicó que se incrementará de USD 90 a 135 el monto para el rancho (alimentación) del personal militar. La idea -dijo- es mejorar la calidad de vida del uniformado.
Los sueldos también aumentaron. Por ejemplo, los USD 119 que ganaba un soldado en el 2006 pasaron a 933 el año pasado. En cambio, el sueldo de un general del Ejército pasó de USD 1 610 a 5 481. Por eso ayer, Correa dijo que los sueldos de las FF.AA. son “dignos” y que ese grupo fue “abandonado por otros gobiernos luego de la paz firmada con Perú en 1998”.
Más explicaciones
Frente a los militares llegaron otras explicaciones, como en el tema del IESS que ha desatado una serie de comentarios por su situación económica y aseguró que esa institución tiene “solvencia económica” y que el 40% lo daría solo si el Seguro necesitaría o si reporta insuficiencia económica.
El exjefe del Comando Conjunto, Paco Moncayo, dijo que un presidente “tiene toda la autoridad para ir a los cuarteles” y “para aclarar las dudas”.
Según el excomandante del Ejército, general Luis Aguas, “este Presidente aprovecha sus visita a las unidades militares para aclarar inquietudes que puedan existir” en las unidades.
Y en medio de todos los anuncios, Correa también dijo que enviará a la Asamblea Nacional una Ley de Cobertura Petrolera, cuyo propósito será estabilizar los ingresos económicos por el comercio del crudo. Técnicamente no es necesario, manifestó el Primer Mandatario, “pero sirve para que los funcionarios que toman decisiones técnicas como del seguro petrolero, estén más protegidos frente a tanto ataque que se ha presentado”.