Tiene 18 años y se estrena como articulista de El Telégrafo. Su padre, el presidente Rafael Correa, lo destacó este 13 de septiembre del 2016 en Twitter. “La nueva forma “científica” de descalificar democracias (Parte I)”, publicó agregando un enlace que llevaba a la primera parte del artículo de su segunda hija, Anne-Dominique Correa Malherbe.
Anne-Dominique, al igual que su hermana Sofía, actualmente estudia en Francia, con becas del Gobierno francés. La joven estudiante de Ciencias Políticas presenta un análisis titulado ‘El arte (o ciencia) de descalificar democracias’. Está estructurado con dos subtítulos: Democracias con adjetivos y The Economist Intelligence Unit of Democracy. Ahí habla sobre las diferencias políticas entre los países del norte y del sur.
Entre varios conceptos, destaca por ejemplo el de “democracia con adjetivos”, “creada por los prestigiosos intelectuales Collier y Levitskyi”, que según la joven Correa, parte de que hablar de democracia al describir a un régimen no es suficiente para describir un caso en particular y requiere de otra palabra que la complemente.
Sin embargo, señala que es común que el adjetivo empleado anule al concepto de la palabra democracia. “¿Qué le queda de democracia a una “democracia autoritaria”?”, se pregunta, y agrega que esto suele ocurrir únicamente para describir a las democracias del Sur y las hace parecer “una farsa, limitadas a su carácter puramente formal. En fin, se jerarquizan regímenes: las “verdaderas democracias” versus las “pseudo-democracias”.
Para llegar a ello, dice la estudiante de Ciencias Políticas, se busca una demostración, entre comillas científica, sobre lo que ocurre en cada caso, a través de indicadores de estudios como The Economist Intelligence Unit of Democracy (EIUD), Freedom House (FH) y Desarrollo Democrático de América Latina (IDD-LAT).
Para la joven, estos estudios son solo “una muestra más de occidentalo-centrismo y de politización de la Academia, siendo América Latina una de las víctimas de estas distorsiones”. Entonces inicia una descripción de dónde provienen los financiamientos para estos trabajos y qué parámetros toma en cuenta para llegar a elaborar esos índices.
En la parte final, detalla algunos aspectos del informe EIUD 2014, en donde se dice que en América Latina no ha habido un progreso democrático y que los únicos países de la región que tienen “democracias perfectas” son Costa Rica y Uruguay, 12 son “imperfectas” (Surinam, Chile, Brasil, Argentina, Trinidad y Tobago, México, República Dominicana, Colombia, Perú, El Salvador, Paraguay, Jamaica), siete son “híbridas” (Guayana, Ecuador, Venezuela, Honduras, Guatemala, Nicaragua, Bolivia) y dos son regímenes autoritarios (Haití, Cuba).
Al cierre comenta: “The Economist Intelligence Unit tiene como país sede… ¡una monarquía!”.
Hasta las 09:50 de este martes 13 de septiembre del 2016, el artículo en la cuenta del presidente Correa logró 393 retuits y 235 me gusta. Llevaba alrededor de una hora en su timeline. Y, además, había decenas de respuestas.