Se concentraron en los exteriores del Coliseo General Rumiñahui (centro) para comenzar su manifestación. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Los integrantes de la Asociación de Chivas Quiteñas y Buses Party organizaron una caravana que se realizó la mañana de este jueves 24 de septiembre del 2020. Ellos plantearon al Municipio que les permitan implementar un plan piloto para retomar sus actividades, las cuales se suspendieron por la emergencia sanitaria del covid-19.
Como parte de eso, elaboraron un protocolo con medidas de bioseguridad para prevenir y minimizar los riesgos de contagios entre los usuarios, así como de quienes laboran en esa área.
A las 10:30, se concentraron en los exteriores del Coliseo General Rumiñahui (centro) para comenzar su manifestación. “Somos 10 empresas y cada una tiene un promedio de cinco chivas, las cuales abastecen toda clase de eventos como concursos de pintura, baile, todo lo que comprende el arte”, manifestó Elizabeth Peñafiel, dirigente de esa organización.
Los propietarios de las chivas insistieron a las autoridades que los escuchen porque han sido afectados por la pandemia. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
También se las utiliza para campañas publicitarias y políticas, o para transportar turistas. “De nuestro trabajo dependen los conductores, coordinadores y la cadena de abastos, DJ’s”, dijo Peñafiel.
Buscaban una reunión con las autoridades para exponer sus protocolos y solicitar que les autoricen aplicar un plan piloto. “Nos hemos preparado con las medidas de bioseguridad”, dijo Peñafiel.
La idea es aplicar el Protocolo General de Bioseguridad para la Prestación del Servicio Turístico enfocado en chivas. Este plantea para los usuarios la toma de temperatura al ingresar a las unidades, uso obligatorio de mascarilla, desinfección de calzado y mantener los distanciamientos.
Para la prestación del servicio plantean:
Establecer un punto de abordaje y desembarque de los asistentes. Fijar la parada única para actividades recreativas y concursos, mismas que deberán ser con distanciamientos. Los organizadores del evento deberán entregar una lista de usuarios en donde deben constar nombres, direcciones y teléfonos.
“Se recomienda al o los organizadores del evento minimizar su lista de invitados a un núcleo social (familiares, amigos, compañeros de trabajo, etc.) que puedan generar un nivel de confianza mayor respecto a su estado de salud. El personal de servicio ofrecerá los suministros necesarios para la desinfección de los asistentes, tales como alcohol, gel, bandeja de desinfección de calzado, entre otros. El personal, antes y después del abordaje de cada grupo, recolectará los desechos de cada evento tomando todas las medidas de bioseguridad y utilizando guantes desechables.
Los propietarios de las chivas insistieron a las autoridades que los escuchen porque han sido afectados por la pandemia y llevan más de seis meses sin trabajar. “De nuestro trabajo dependen otras familias que han quedado en la desocupación. Por último hemos visto que casi todas las actividades económicas del país están reactivándose, tal es el caso de los buses turísticos de dos pisos”.