Junto a su hermana Liliana, el alcalde Yunda realizó un recorrido a pie desde la calle Guayaquil hacia el Teatro Sucre. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Zeus fue el compañero de Jorge Yunda en su ingreso al Teatro Nacional Sucre, para su posesión como el alcalde de Quito de los próximos cuatro años. Se trata de un pastor inglés que él rescató y al que ayudó a superar los traumas del maltrato. Esa fue una muestra de su plan de trabajo por el control de la fauna urbana y el cuidado de los animales, que será una de sus prioridades, según lo anunció.
En la mesa principal lo esperaban el alcalde saliente, Mauricio Rodas; el arzobispo de Quito, José Espinosa, y la presidenta del CNE, Diana Atamaint, quien dijo sentirse honrada de entregarle a Yunda el botón y el collar que lo designan oficialmente alcalde.
Rodas, en cambio, le entregó el bastón de mando, levantó su mano en señal de despedida, hizo una venia, como agradecimiento a la ciudad, y se fue.
Defensores de los derechos humanos y de los animales, funcionarios históricos, vecinos de barrios tradicionales, líderes del deporte barrial, líderes juveniles, sobrevivientes de enfermedades catastróficas, otorgaron los botones a los 21 flamantes concejales.
A las 07:00 Yunda asistió a una misa en San Francisco. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Enseguida, el hasta hoy locutor de radio se acercó al podio para su discurso. La lucha contra la inseguridad, la violencia y los femicidios, el cuidado del medioambiente, la recuperación del río Machángara, la clasificación de la basura y la colaboración ciudadana fueron algunos de los puntos que tocó en su discurso como Alcalde.
Las sesiones del Concejo pasarán de la sala ubicada en el Palacio Municipal a los barrios en donde viven los mandantes, anunció Yunda, y les pidió arrimar el hombro para trabajar por la ciudad por encima de intereses partidistas.
Entre todas las obras y proyectos que anunció, incluida la compra de buses eléctricos, también dejó un pequeño espacio para el humor: vamos a seguir jugando ecuavóley. Y otro para agradecer a sus padres, que se encontraban en el palco central, junto a sus hermanos y a sus hijos, Sebastián y Anahí. Su hermana Liliana se sentó adelante, pues será parte de su equipo, como Presidenta de la Unidad Patronato San José. Así, Yunda cerró una ceremonia protocolar a la que antecedió un recorrido desde San Blas hasta el Teatro Sucre, entre poncheros, tromperos, dulces tradicionales y alegría quiteña. Una marcha por los estipendios de los internos rotativos se cruzó con el preludio de la posesión y el nuevo Alcalde abrazó a una de sus futuras colegas que logró acercarse a él.
Después de 15 años, Yunda se despidió ayer de la radio. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Le mostró su solidaridad como lo hizo durante su discurso, en el que rechazó la reducción de los estipendios que ha planteado el Gobierno central, mientras él y todos a su alrededor tenían los ojos llorosos por el gas que se sentía en el ambiente.
Por la mañana, la nostalgia de dejar su programa ‘Radiación Temprana’ le arrancó las típicas carcajadas del programa matutino pero también lágrimas. Escuchar su voz entrecortada relatando el momento de la muerte de su hermano Ney, hace 10 años, revivió un dolor de una herida aún abierta. Estalló en llanto al recordar cómo le deseó buen viaje y su corazón dejó de latir. Junto a él, su compañero inseparable, Patricio Díaz, también se ahogó en los recuerdos.
Sin embargo, Yunda recordó la importancia de la risa y cómo el espacio radial que también comparte con el último de sus hermanos, David, ‘El Pasante’, era medicina para el dolor del alma o el cuerpo. Como despedida, sus colaboradores, tanto de micrófonos como del área administrativa de la radio, le habían preparado un pastel inspirado en él.