La Unidad de Policía Comunitaria de Carapungo, norte de Quito, se encuentra ubicada en la Panamericana Norte y Padre Luis Vacari. Foto: Cortesía Policía Nacional
La Policía Nacional informó que, el sábado 12 de octubre de 2019, una Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Carapungo, ubicada en el norte de Quito, fue destruida e incendiada por un grupo de vándalos. Este hecho ocurrió en medio de las protestas por el paro nacional que culminó ayer.
En el lugar situado en la Panamericana Norte y Padre Luis Vacari aún yacen escombros, pedazos de vidrios, ceniza y paredes manchadas de negro producto de las llamas que consumieron los enseres y artículos de oficina de los uniformados. La agresión cometida puso en riesgo la vida de policías que estaban dentro. Ninguna ventana quedó intacta de este suceso. Los baños, dormitorios y áreas de oficina fueron transformados en ruinas. Los grafitis con ofensas al Gobierno Nacional y la Policía cubren las paredes. Una cinta amarilla que dice ‘peligro’ impide el acceso para los transeúntes hasta que se determinen las responsabilidades.
El capitán Luis Morales, quien estaba al mando en esos momentos, comentó que la agresión a la UPC fue un acto reprochable. “Al no contar con la seguridad para el personal policial tuvimos que cerrar las puertas con seguro y salir. Estábamos muy pocos policías y no podíamos contrarrestar la arremetida de los manifestantes. Aparentemente fue un grupo de ciudadanos ajenos a la comunidad quienes cometieron estos actos vandálicos“, dijo.
“Condenamos estos hechos que lesionan el orden constituido y la seguridad ciudadana“, informó el Ministerio de Gobierno a través de un video donde muestra la gravedad de los hechos del sábado en esta UPC. También siete motocicletas fueron destruidas y quemadas por una turba enardecida.
A través de esta unidad, la Policía brindaba seguridad para 10 0000 habitantes de este sector. Este lamentable suceso ha sido repudiado por la comunidad del sector quienes afirman que ellos serán afectados hasta que se restablezca la unidad.
Gustavo Iturralde, uno de los moradores de Carapungo, recuerda que el fatal suceso empezó aproximadamente a las 20:00. “Fue un caos lo que pasó. Personas que no son de aquí vinieron a hacer daño. Se veía como saqueaban las cosas de la UPC y se las llevaban. La comunidad estaba atemorizada porque no solo que tenían palos, sino que andaban con armas blancas. No pudimos hacer nada para evitar lo que pasó”.
Además, otras personas habrían dañado la cámara de ojo de águila que se encuentra en el puente peatonal sobre la vía Panamericana Norte según cuenta Iturralde. Personas que transitaban por este sitio miraban con horror los daños causados. “Esta UPC era de la comunidad de aquí de Carapungo y ahora nos quedamos sin nada”, lamenta Graciela Proaño.