La organización barrial es clave para la instalación de una alarma. Esa lección la aprendieron los moradores de las calles Juan Jácome y Cristóbal Tenorio, en la Villa Flora, en el sur de la ciudad.
Los constantes robos les motivó a buscar una opción de seguridad. Conocieron sobre el proyecto de alarmas comunitarias del Municipio, que cubre el costo de los equipos. Así iniciaron el trámite (ver pasos).Si los vecinos de un sector no están unidos, de nada sirve querer instalar un sistema, cuyo costo bordea los USD 3 000.
No todos los pedidos realizados al Cabildo son aceptados. Allí se priorizan los barrios donde se registran más delitos cometidos.
En caso de no tener una respuesta favorable, los moradores pueden organizarse para adquirir los aparatos. En ambas circunstancias, el Cabildo y la Policía dan asesoría. Las alarmas se conectan con los retenes barriales para una mayor efectividad.
Para fomentar la unión en el barrio
El saludo. La comunicación entre los moradores es clave para mantener la unión. Gustavo Padilla, del Comité de Seguridad de la Villa Flora, aprendió que un saludo permite romper las distancias entre vecinos.
Los teléfonos. Es importante que las familias tengan un directorio telefónico con los números convencionales y celulares de todos sus vecinos. Así, en caso de emergencia y de no estar en casa, se pueden armar cadenas telefónicas.
Tomar en cuenta a todos. En las actividades que se realicen en el barrio deben incluirse todos los vecinos, incluso a los nuevos. No hay que dejar fuera a los moradores de la tercera edad. Ellos pueden aportar con su experiencia.
Otro mecanismo. Hasta que el sector cuente con una alarma, los vecinos pueden optar por otras alternativas de seguridad. Una de ellas es la utilización de pitos o silbatos para alertar alguna emergencia en un barrio.
Ojo con las falsas alertas. Los vecinos deben activar el mecanismo de seguridad que hayan adoptado, solo en caso de emergencia. De lo contrario perderá credibilidad y los moradores no lo tomarán en serio.
Evaluaciones. En caso de tener una alarma instalada en un barrio es importante realizar simulacros periódicos. Esto permitirá ver si todos los dispositivos electrónicos funcionan correctamente o si hay que darles mantenimiento.
Otras actividades. También se puede fomentar la unión entre los moradores con actividades recreacionales, como partidos de vóley o fútbol. Además, se puede celebrar los cumpleaños del mes de los hijos de los vecinos.
El contacto policial. Es importante que la directiva del barrio tenga contacto con la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de su sector, para que conozcan sobre su organización. El primer paso es intercambiar números telefónicos.
Los 7 pasos que deben seguir los vecinos
La organización entre moradores. Uno de los habitantes debe tomar la iniciativa y plantear el tema con sus vecinos. Puede reunirlos o ir de casa en casa. Este es el paso clave para el éxito del proyecto.
El trámite formal. El líder del barrio debe presentar una solicitud a la Administración Zonal más cercana a su barrio. Debe estar dirigida al Administrador e incluir un número telefónico para contactarlo.
Análisis de la propuesta. Los funcionarios del Departamento de Seguridad analizan el pedido, sustentándose en las estadísticas del Observatorio de Seguridad. El Administrador aprueba la solicitud.
La coordinación entre los involucrados. Los funcionarios del Municipio coordinan con la Policía los horarios y los días en los cuales se impartirán las charlas a los moradores. Además, se fija el lugar.
Las jornadas de capacitación. La Policía y el Municipio dictan las charlas. Entre los temas que se tratan están la autoprotección, el uso de las alarmas, gestión de riesgos y violencia intrafamiliar.
La instalación de equipos. La alarma es comprada por el Cabildo. En caso de que se negara el pedido, los vecinos pueden adquirirla por su cuenta. Para un sistema de 30 beneficiados la cuota llega a USD 100.
El simulacro. Los vecinos, los uniformados de la Unidad de Policía Comunitaria del barrio y los funcionarios del Municipio organizan el simulacro. La evaluación es importante para corregir los errores.