Las obras que se desarrollan en la segunda fase de la Ruta Viva son trabajos que realiza la empresa constructora. Foto: Valeria Heredia/ EL COMERCIO
La repavimentación de la calzada y la nueva señalización son parte de los trabajos que se realizan a lo largo de la Ruta Viva, que conecta la avenida Simón Bolívar (en el sector San Juan Bautista Alto) con la Interoceánica (en Puembo). Estas obras son parte de la garantía técnica que ejecuta la empresa constructora una vez que se han identificado algunas fallas.
Así lo afirmó Alejandro Larrea, gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas, Epmmop, la mañana de este viernes 22 de mayo de 2015. Para Larrea, estos trabajos no implican que la obra esté mal hecha sino que se le pide al constructor que arregle, por ejemplo, las fisuras que se observan en la vía. Esto antes de recibir totalmente la obra. “Se lo hace para que no exista inconvenientes futuros y para que los conductores utilicen la ruta en condiciones óptimas”.
Los gastos de estas obras son asumidos por la empresa constructora, ya que debe entregar la obra en buen estado, explicó Larrea.
Esta arteria, que facilita la llegada hacia el Aeropuerto Mariscal Sucre de Tababela, se la construyó en dos fases.
La primera, que mide 5,5 kilómetros, está en etapa de recepción definitiva. Aquí, se encontraron fisuras en la capa de rodadura en el escalón de Lumbisí y en el intercambiador Auquitas.
Por lo que la empresa constructora Odebrecht se encargó de reparar la capa y señalizó nuevamente la vía. “Se trabajó en todo el escalón Lumbisí. Fueron 800 metros aproximadamente y en el intercambiador Auquitas”.
Ahora se espera que sea recibida completamente en unas tres semanas.
Mientras que la fase dos, de 7,4 kilómetros, está en etapa de recepción provisional. Es decir, están en el proceso de revisión de saldos y demás rubros. Este proceso de revisión y arreglos durará hasta diciembre.
Una de las situaciones que preocupa a Larrea es que la empresa constructora no está realizando el mantenimiento de los parterres de la vía. Según el Funcionario, se debería realizar este trabajo para evitar un deterioro de las jardineras. “Hay tramos con pasto crecido y seco. No debería ocurrir esto porque los usuarios merecen ver una ruta en buenas condiciones”.
La fase tres de la Ruta Viva iniciaría en 2016
La construcción de la fase tres, que iría desde Puembo hasta Tababela, iniciaría en 2016 y concluiría a mediados del 2017. En total serían 20 meses.
Esta fase habría tenido inconvenientes desde los estudios, que los realizó la administración anterior. “Los estudios debieron ser realizados en campo. No hay documentos de detalle. Lo que se hizo es liquidarlos”, dijo Larrea.
Ahora, le apuestan a una alianza público – privada que construiría la fase tres, que reduciría unos 20 minutos la llegada a Tababela.
A su vez, con esta alianza se haría una facilidad vial que implica la construcción de un túnel que conecta la Simón Bolívar con la calle Portugal. Atravesaría la montaña y el Parque Metropolitano Guangüiltagua. “Lo hacemos para brindar una mejor movilidad en la urbe”.