En Quito existen 325 operadoras de taxis que agrupan cooperativas y compañías. Foto: archivo / EL COMERCIO
No es novedad decir que algunos taxistas del Distrito Metropolitano de Quito no usan taxímetro al momento de realizar las carreras. Y durante los operativos, en los primeros cinco meses del 2017 (hasta mayo), 124 personas fueron sancionas.
El pasado año sumaron más: 1 026. Así lo ratificó hoy, sábado 17 de junio del 2017, Darío Tapia, secretario Metropolitano de Movilidad.
Estos datos se obtuvieron en el último estudio de oferta y demanda de taxis en Quito. Otros datos indicaron que el 20% del taxismo formal del Distrito no usa taxímetro durante el día y en la noche, aumenta al 40%.
Aplicando una fórmula de movilidad del Reino Unido (PUD), se llegó a saber que 6.37 minutos es el promedio que un usuario está dispuesto a esperar un taxis; también que tiene la voluntad de pagar un precio justo (a través del taxímetro). Un tercer punto: que haya cobertura en el extremo de la ciudad o en el hipercentro. Y que los taxistas brinden el servicio al destino que desee el usuario no al que quiera el taxista.
¿Dónde hacer las denuncias? Según Tapia pueden acercarse a cualquiera de los 2 000 agentes que trabajan a lo largo y ancho de la ciudad, o hacerlo en las páginas institucionales de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) o llamando al número 1800AMTAMT.
También hizo un llamado a los taxistas formales porque siempre hay la oportunidad de mejorar. Señaló que desde su punto de vista “la informalidad siempre se da cuando hay sectores de cobertura que no son atendidos por la formalidad”.
Por lo tanto, agregó, “esta es la oportunidad para que el servicio tenga que mejorar, debe ser óptimo y además tiene que ser justo. Y para que sea justo lo único que se necesita es que haya un taxímetro funcionando siempre”.
Los dirigentes del taxismo están de acuerdo en entrar a un proceso de capacitación. Carlos Brunis, presidente de la Federación de Taxis Convencionales de Pichincha, dijo hoy que: “No pedimos privilegios, solo que se cumpla la Ley. Si algún compañero deja de dar el servicio o no usa el taxímetro debe aplicarse el Código Orgánico Integral Penal”.
Recordó que las sanciones son duras, pues al no usar taxis corre el riesgo de perder 4. 5 puntos de su licencia y una multa del 15% del salario mínimo. Mientras que al negarse a dar el servicio perdería 7.5 puntos y 40% del salario.
Y para recordar esas sanciones, así como las normas de tránsito están dispuestos a capacitarse. Esos talleres comenzarían desde julio, aprovechando las vacaciones escolares; también se impartirían módulos sobre el servicio al cliente.
Brunis indicó que todos los integrantes de las 325 operadoras -que agrupan cooperativas y compañías- entrarán en esta capacitación, la cual estará a cargo del Municipio de Quito. Las clases serán en grupos de 30 a 35 personas.