La extensión de la Boussingault (izq.) está ya habilitada. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
La versión renovada de la Solución Vial Guayasamín todavía resulta incierta. A 13 meses de que se iniciara la construcción de la fase 1 (extensión de la calle Boussingault), los nuevos estudios de las fases 2, 3 y 4 aún no son públicos. Tampoco se dispone información sobre el cronograma, el presupuesto ni el trazado vial.
Durante la sesión del Concejo del 15 de febrero pasado, el entonces gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), Alejandro Larrea, informó que tras las observaciones realizadas a la obra, se contaría con todos los estudios de reingeniería en abril del 2017. Sin embargo, todavía existen trámites pendientes.
Actualmente, los estudios definitivos de este proyecto presentan un avance de un 80%, informó Juan Pablo Solórzano, gerente general subrogante de la Epmmop. El 20% restante corresponde al proceso de revisión y análisis que debe realizar un equipo técnico de la Epmmop
La empresa China Road and Bridge Corporation (CRBC) entregó los estudios de los diseños de las fases 2, 3 y 4 al Municipio, el pasado 28 de abril. En estos se incluyen los estudios estructurales, geológicos, geotécnicos, de señalización, de pavimentos, de drenajes, sísmicos y de viento, ambientales y de seguridad.
La fase 4 requirió ajustes adicionales en el estudio del drenaje y la construcción de dos colectores en el norte de Quito, para aliviar la descarga en el colector Iñaquito. Esta etapa es la que presentará mayores cambios, pues se eliminará el paso elevado en la plaza Argentina, para -en su lugar- construir un deprimido.
Además, la nueva versión de este proyecto incluirá al transporte público.
De toda la Solución Guayasamín solo está construida la fase 1, que consiste en la extensión de la calle Boussingault. Esta ya se encuentra habilitada al tránsito vehicular, aunque su trazado vial aún no ha sido aprobado por el Concejo, precisó Sergio Garnica, concejal y presidente de la Comisión de Uso de Suelo.
Aparte de esta intervención, por el momento no se realiza ninguna otra intervención en la zona donde se ejecutará la Solución Vial Guayasamín.
“Si los plazos se hubiesen cumplido, conforme el contrato, ya estuviésemos viendo la estructura del puente, la ampliación de la avenida Interoceánica (…) Pero no se ha avanzado porque la obra estuvo mal planificada desde el inicio”, mencionó Daniela Chacón, concejala independiente.
Ante esta situación, la edil cree que el Municipio debiera dar por terminado el contrato con CRBC, por mutuo acuerdo, y buscar otra alternativa para mitigar la congestión vehicular en la zona.
La propuesta en la que la Epmmop y CRBC trabajan actualmente implica una renegociación para establecer el nuevo cronograma y la corrida financiera de la Solución Guayasamín. Esta información y los estudios definitivos de las fases 2, 3 y 4 se presentarán al Concejo Metropolitano en el segundo semestre del presente año, informó Solórzano.
En abril del 2016 se anunció que la construcción de la Solución Vial Guayasamín tomaría 28 meses y demandarían USD 131 millones de inversión. Pero esta propuesta no incluía el paso del transporte público ni reformas en la plaza Argentina.
Los estudios iniciales tenían “falencias”, sostuvo Handel Guayasamín, expresidente del Colegio de Arquitectos de Pichincha, quien participó en las mesas de diálogo sobre las observaciones a este proyecto. Por esta razón, sugirió que en esta ocasión el Municipio difundiera el proyecto antes de empezar con las obras para evitar contratiempos.
Si la nueva propuesta incluye las reformas planteadas en las mesas de diálogo, el cuello de botella que se forma a diario en este punto de ingreso a la zona urbana de Quito podría ser resuelto, señaló Guayasamín.
En promedio, por este sector circulan unos 34 000 automotores diariamente.
Con la Solución Vial Guayasamín se pretende mejorar la movilidad entre Quito y los valles de Cumbayá y Tumbaco. En esta se incluye, por ejemplo, ampliar un tramo de la av. Interoceánica a cinco carriles, entre otros (ver infografía).
Por estas características, Marco Ponce, concejal de SUMA y presidente subrogante del Directorio de la Epmmop, está convencido de que se debe apoyar a su ejecución. “Esta obra debe ir bajo todo punto de vista. Ojalá se logren solucionar los problemas”. Cree que pese a ser una obra importante para la ciudad, ha afrontado problemas políticos. Pero eso no implica -según Ponce- que el Municipio desista de la ejecución de este proyecto vial.