La última ordenanza aprobada por el Concejo Metropolitano de Quito saliente fue la que designa a Quito como Ciudad de Paz. En ella también se aprobó la asignación de un espacio público en la av. Naciones Unidas, en memoria de Efraín Segarra Abril, Paúl Rivas Bravo y Javier Ortega Reyes, trabajadores de Diario EL COMERCIO, asesinados en la frontera norte. También está dedicado a los cuatro marinos y a la pareja de ecuatorianos que perdieron la vida en la misma zona, en el 2018.
Antes, en esa sesión realizada este lunes 13 de mayo del 2019, se completó la legalización de un grupo de barrios que completan un total de 196 regularizaciones durante la administración Rodas, que duró cinco años. En esos sectores viven alrededor de 50 000 personas, informó.
Con esas ordenanzas, suman 357 aprobadas por el Concejo del que Mauricio Rodas se despidió con apretones de mano y abrazos, luego de decir que presidirlo ha sido el más alto honor de su vida.
La jornada, el Alcalde saliente la inició temprano. Contó que, como cada día, sus hijos lo despertaron a él y a su esposa María Fernanda Pacheco y se acurrucaron en su cama, junto a Truman, su nueva mascota.
La mañana transcurrió entre una entrevista radial, despacho de documentos pendientes y su última rendición de cuentas: la hizo en una sesión de la Asamblea de Quito. Aunque no era obligatorio, Rodas lo quiso hacer porque afirma que al ser la más grande instancia de participación ciudadana de la ciudad, era el espacio indicado para informar sobre su trabajo.
Entre las obras que resaltó están el Punto de partida para la Zona Especial de Desarrollo Económico (Zede), que cuenta con el apoyo del Gobierno y la asesoría del PNUD. También mencionó al Metro de Quito y a los avances en la peatonalización del Centro Histórico de Quito, esta última orientada a proteger el patrimonio arquitectónico de la zona y a mejorar la calidad del aire. También mencionó que Quito ha tenido un rol activo en redes internacionales por el cambio climático, especialmente en varias organizaciones que juntan a alcaldías de distintas ciudades del mundo.
El próximo martes 14 de mayo de 2019, Mauricio Rodas dejará de ser Alcalde. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Luego, Rodas también debió esquivar las vallas de la Plaza Grande -que estuvo sitiada en la mañana y en la tarde- para hacer su última visita al Palacio de Carondelet, como alcalde de Quito. Había pedido una audiencia con el presidente de la República Lenín Moreno, para agradecerle por el trabajo coordinado que pudieron realizar desde el 2017, cuando él asumió el cargo y despedirse.
Según Rodas, fue un día de sentimientos encontrados que le generó nostalgia y también satisfacción por algunas obras que considera son claves para el futuro como las vías periféricas, los 200 Guagua Centros o los parques nuevos Bicentenario y Parque Carollo. Las obras sociales, dijo, tienen un lugar especial en su corazón y no las olvidará nunca.
Luego de la última sesión extraordinaria del Concejo, Rodas bajó al hall del Palacio Municipal, en donde lo esperaban representantes de grupos de 60 y Piquito, Empleo Joven y otros programas sociales de la Unidad Patronato San José, quienes develaron una placa de agradecimiento por todas las actividades que se realizan en ellos.
Rodas se mostró emocionado y, junto a su esposa, recibió abrazos y sentidas palabras de las personas que también les regalaron placas de vidrio con leyendas dedicadas a ambos. Una placa metálica instalada en la pared contigua a la puerta principal del Municipio, se quedará ahí con la gratitud de la gente.
Los asistentes le pidieron tomarse decenas de fotos junto a ellos, al igual que los funcionarios del Municipio, que esperaron hasta el final para la despedida. Rodas recordó que tuvieron una reunión similar el primer día de sus funciones. “En aquella ocasión, les pedí arrimar el hombro, dar lo mejor de nosotros, dar nuestras manos y nuestro esfuerzo en favor de Quito y los quiteños. Les pedí también que compartan conmigo el aprendizaje y la experiencia maravillosa que ustedes han acumulado, en muchos casos, durante muchísimos años. Les dije que desde ese momento me sentía orgulloso de ser parte de este equipo y de poder llamarlos compañeros“.
Volviendo la vista sobre estos cinco años, Rodas agradeció a los funcionarios por haber cumplido su pedido y por su entrega y compromiso por la ciudad.
Mañana, cuando oficialmente dejará de ser Alcalde, Rodas intentará dormir un poco más, luego de que los niños vayan a la escuela. Por la tarde, elegirá un traje, una camisa y una corbata para ir al Teatro Nacional Sucre, en donde Jorge Yunda le tomará la posta en la dirección de la capital para los próximos cuatro años.
Rodas subió las gradas entre aplausos de sus compañeros de trabajo, rumbo a su despacho, para terminar en privado las tareas pendientes.