‘Solo dejaron los tornillos”, dijo una mujer mirando a uno de los quindes de la muestra ‘Quito, Jardín de Quindes’ en el bulevar de la avenida Naciones Unidas, en el norte.
María del Pilar Saá solamente pudo apreciar la escultura mas no el nombre del artista ni el de la obra, pues la placa con esa información, que debería estar en el pedestal, no estaba.
“La gente es ignorante, no valora nada ni el trabajo del artista. Es una pena saber que algunos (quindes) están agredidos”, comentó Saá apenada.
Ocho esculturas, de un total de 65, realizadas por artistas ecuatorianos, que se exhibirán hasta el 29 de febrero, han sido violentadas de alguna manera.
“No entiendo qué obtienen destruyendo cualquier cosa que esté a su paso”, agregó la mujer.
Caminando hacia el oriente, otra obra está incompleta. Esta vez son piezas de la propia escultura las que no están. A la obra ‘Yo soy tú mismo’, adornada con espejos le faltan unos cinco.
La muestra de arte urbano en el bulevar fue inaugurada el pasado 30 de noviembre. Desde aquella fecha el sitio se ha convertido en un destino turístico escogido por extranjeros y nacionales.
El sábado pasado a las 10:00, hombres, mujeres, parejas y adultos mayores paseaban por el sitio y se detenían a tomar fotos. Los más pequeños correteaban entre las esculturas. Ciclistas y personas con sus perros también formaban parte del entorno.
Marcela Flores y Álvaro Boada miraban la obra ‘María Sol’. “Es lindo pasear por aquí pero da pena ver que algunas obras están destruidas. A esta placa le rasparon la información y uno se queda con las ganas de saber quién es el artista”, dijo Flores.
Como esa placa hay otras en las que la información es poco legible. Hay una en la que solamente se lee ‘Quito Capital de la Cultura 2011’. No hay información sobre el artista ni la obra.
Cerca de las 11:00, alrededor de ocho uniformados metropolitanos custodiaban el bulevar. La agente Sarango era uno de ellos. “El problema es que la gente no colabora. Nosotros hacemos nuestra labor pero tienen que saber que esto es de ellos, de todos”.
Xiumara Vilchez, de Venezuela, permanecía sentada en una de las bancas. “Es muy lindo, por eso estoy sentada aquí, pero ya hay algunas que tienen rayones en las bases. No critico porque hay gente así en todo lado. Es falta de educación”, opinó.
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La muestra tiene un total de 65 esculturas de las cuales, por lo menos, ocho han sido violentadas de alguna manera.
Este bulevar no es el primero en sufrir daños. El pasado 30 de diciembre, la Policía reportó destrozos en el de la 24 de Mayo.