Desde esta semana, se convirtió en oficial la modificación del canto del Himno a Quito (se entonará la cuarta estrofa en lugar de la segunda). Sin embargo, aunque los promotores de la iniciativa, que fue aprobada el jueves por el Concejo Metropolitano, sustentan la adaptación en la celebración del Bicentenario, hay quienes cuestionan la normativa.
Esta no es la primera vez que se realiza la modificación. En la Alcaldía de Gustavo Herdoíza también se hicieron adaptaciones. Pero se restauró en 1992, en la administración de Rodrigo Paz.
Uno de los críticos a esta medida es el concejal Fabricio Villamar, presidente de la Comisión de Educación y Cultura. Él sostiene que lo que se había planteado en primer debate es que se hiciera la modificación solo en eventos oficiales y durante el Bicentenario. Para él se deja una puerta abierta para que un futuro Concejo vuelva a modificar uno de los símbolos de la ciudad. La concejala María Luisa Maldonado, una de las promotoras de la normativa, sostiene que hay un sustento histórico. El historiador Wladimil Serrano explica los distintos puntos del texto.
En 1986 ya se suprimió esta estrofa, en 1992 se restableció
Wladimir Serrano / Historiador
Las estrofas que se refieren tanto al hecho de que Quito está ubicada en los Andes y que es la ciudad que el Incario soñó, hablan de la historia de la ciudad. Estas palabras están en la estrofa que se suprime.
Bernardino Echeverría, compositor de la letra, habla de los orígenes indígenas que tuvo la ciudad. La letra del himno, precisamente la cuarta estrofa, también hace referencia a los orígenes culturales de Quito. Es imposible comprobar esa historia, porque no hay ruinas y no se ha demostrado la grandiosidad de otras civilizaciones. Pero el canto lo hace y se basa en la historia.
Que se agregue la estrofa de exaltación de la ciudad está bien, pero ¿por qué no pueden estar las dos? Con eso se acabaría la polémica. Se debe respetar el origen histórico Si se saca la segunda estrofa habría la intención que conlleva un viejo resentimiento con España. Resentimiento que antes ya lo expresaron los criollos de la época colonial. Ya hubo un conflicto similar con el Himno Nacional con el representante de España en el Ecuador.
Existe el hecho de que el resentimiento criollo se constituye luego en la nación y se quita la nación indígena, que era la que prevalecía.
Pero no es la primera vez que sucede un hecho así. En la administración de Gustavo Herdoiza, en 1986, ya se suprimió esa estrofa. Y fue restablecida en 1992 con Rodrigo Paz, porque el pueblo de Quito quiere seguir cantándola así.
Estos cambios son innecesarios. Hay una intención de carácter político cultural para su ejecución. Hacerlo es ignorar la historia.
La adaptación del canto se sustenta en la celebración del Bicentenario
Ma. Luisa Maldonado/ Concejala
Existe una Ordenanza donde está aprobado el Himno a Quito. Se canta desde 1945. El Himno no se ha cambiado. Lo que nosotros hacemos -y no es la primera vez que se plantea una modificación en términos de cantar la cuarta estrofa en lugar de la segunda- es una adaptación al momento que estamos viviendo: conmemoramos nuestros 200 años de independencia.
Nos parece importante que como autoridades seamos capaces de identificar esto para desarrollar valores y que, como ciudadanos mestizos, reconocemos esta gesta libertaria y heroica. La estrofa que vamos a cantar fortalece la rebelde identidad quiteña. Los niños también sentirán esta fuerza al cantar.
La ordenanza lo que hace es normar lo que ya está pasando desde el 2009: en el Concejo Metropolitano, en eventos oficiales, en planteles educativos ya se ha venido cantando el himno con la adaptación.
No se trata de negar que tenemos una relación matriz con España. Estamos revitalizando otra cosa, por el momento que estamos viviendo. Puede ser que venga otro Concejo Metropolitano y diga ahora queremos que se cante así porque es lo que estamos viviendo. Así como se hace se deshace una normativa.
Pero no estamos jugando con el símbolo, lo estamos potenciando. Como autoridades tenemos que ser capaces de dar una lectura histórica del momento que estamos viviendo. La difusión se va a dar como se ha venido haciendo. En actos oficiales se entrega una hoja y he solicitado que se cuelgue en la página web del Municipio y que sea la Banda Municipal quien la entone.