El colectivo ciudadano ‘Indignados Granda Centeno’ se reúnen para controlar la inseguridad que se vive en el barrio ubicado al norte de Quito. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Los moradores que viven en el barrio Granda Centeno, ubicado en el norte de Quito, están indignados por la serie de asaltos y robos que se registran en el sector. Ante esa esa realidad, ellos crearon un colectivo ciudadano para buscar estrategias que afronten esa problemática.
Este se llama ‘Indignados Granda Centeno’ y cuenta con 400 agremiados. La mañana de hoy, miércoles 19 de junio del 2019, un grupo de vecinos realizó un plantón en el parque de ese lugar -ubicado en las calles Granda Centeno y Domingo de Brieva- para exigir a la Policía Nacional que refuerce los patrullajes. Se quejaron que la UPC que funciona dentro del parque permanece cerrada la mayor parte del tiempo, sin atención.
Andrés Villalba, presidente de la agrupación, manifestó que los asaltos son recurrentes y se ha identificado que desconocidos se movilizan en motocicletas y automóviles sin placas para atacar a los transeúntes.
Solicitan a las autoridades que la UPC permanezca abierta las 24 horas y se atienda con mayor celeridad a las víctimas de los atracos. Hoy temprano, la gente portaba banderas rojas y gritaba consignas. También se quejaron de que un local fue asaltado el martes 18 de junio.
Asimismo, denunciaron que hay robos de casas. “Hemos tenido días en los que se han multiplicado los robos”, acotó del dirigente.
El coronel Carlos Blanco es jefe de operaciones del Distrito Metropolitano de Quito. Asegura que los robos y asaltos no se presentan de forma recurrente en el barrio Granda Centeno.
Señala que la Policía Nacional ha destinado personal adicional en los parques, calles y avenidas para reforzar los patrullajes. También en las paradas de los corredores de transporte.
“Invitamos a la gente de la Granda Centeno para que acuda a la UPC y active el botón de auxilio que es de mucha utilidad”, manifestó.
El coronel negó que se reporten 10 robos al día en esa zona. Al contrario, indicó que son “bastante bajos. En el peor de los casos se da uno en la zona baja del barrio. La Granda Centeno ha sido cubierta con dos patrulleros, motocicletas y personal que trabaja de forma constante”.
Añadió que se despliegan patrullajes aleatorios y policías vestidos de civil. Son de Inteligencia y tratan de identificar a los grupos delictivos que generan temor entre la gente. En lo que respecta a la UPC, Blanco manifestó que esta no ha sido cerrada.
“Siempre hay una persona que trabaja allí”. No obstante, a veces, por atender otras emergencias se traslada a otros lugares.