El mal uso de las aceras sin control

Los vehículos mal estacionados a lo largo de la avenida Maldonado causan problemas en la circulación. Ayer, entre las 10:30 y las 11:30, 25 conductores parquearon sus automotores sobre las veredas y a un costado de la arteria, entre Guamaní y San Bartolo.

En el sector de Guamaní, el chofer de un camión utilizó la acera para estacionarse, en la mañana, mientras ingresaba a un negocio de venta de vidrios.El conductor encendió las luces de parqueo y dejó el automotor por más de 10 minutos. Los peatones que circulaban por el lugar debieron bajar hasta la calzada, para continuar a sus destinos.

Lidia Moncayo llevaba dos fundas de compras y a su nieta de la mano. Con cuidado pidió a la pequeña que mirara a los dos lados antes de bajar a la calle y pasar al camión estacionado. “Es una falta de respeto. Aquí no hay cómo caminar tranquilamente”.

En ese mismo sector, en la acera oriental, una camioneta también estaba sobre la vereda. Su conductor, Édison Soto, reconoció la contravención pero se excusó porque tenía que comprar repuestos para su vehículo.

“En este sector no hay otro lugar para estacionarse”. A menos de 50 metros hay una calle transversal. Soto dijo que no estaciona su auto en las calles aledañas por temor a robos, como ya le sucedió hace dos semanas. “Dejé el carro en esas vías y me robaron la memoria del equipo”.

En esa misma cuadra, una camioneta sin placas también ocupaba el espacio destinado para los peatones. Su propietario compraba material en una ferretería de la av. Maldonado.

Según la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, estacionar en lugares prohibidos constituye una contravención leve de segunda clase. Esta infracción se sanciona con una multa equivalente al 10% de la remuneración básica y la reducción de 3 puntos en la licencia de conducir.

Oswaldo Zurita tiene una furgoneta blanca y también utilizó ayer la acera como estacionamiento. Él esperaba que lo atendieran en un local de carpas, en la av. Maldonado y Joaquín Gutiérrez.

Él conoce la Ley de Tránsito, pero afirma que nunca lo han sancionado por estacionarse en ese lugar. Según el conductor, se ve obligado a cometer la falta porque no hay estacionamientos.

“Desde que construyeron el carril exclusivo para los buses, la vía se hizo más estrecha. Además, las veredas son muy anchas”.

El conductor se refiere al Corredor Sur Oriental, que va desde La Marín y llega hasta Quitumbe. Esta obra se inició en el 2006.

Rafael B. tiene una vulcanizadora en la av. Maldonado y Manglar Alto. Según el propietario del taller, el negocio decayó desde la construcción de esa vía. Afirma que achicaron la calzada y eso impide que sus clientes lleguen hasta su negocio. “Se forman congestiones terribles, porque la vía es muy estrecha. Eso afecta a mi negocio y a mi trabajo diario”.

Sofía Altamirano vive en Guajaló y a diario utiliza los buses que van por la Maldonado. La estudiante se queja por los trancones que se forman, en especial, en los sectores de La Lucha de Los Pobres. La joven asegura que los carros mal estacionados reducen el ancho de la vía. Además, que los buses no respetan las paradas y van en los dos carriles.

Frente a la estación del Corredor Sur Oriental existe un taller de motocicletas. El espacio para los peatones es reducido. Ayer, un conductor de una moto utilizó la acera para circular hacia el sur. Rebasó a dos transeúntes, quienes caminaban sobre la vereda.

El Municipio impulsó una campaña para sancionar a los mal estacionados. Los controles se realizan en el norte y en el centro de Quito. La propuesta del Cabildo es recuperar el espacio público y llevar los controles al sur de la ciudad. Sin embargo, la propuesta no se ha concretado todavía.

Ayer, cerca del mediodía, había más vehículos estacionados en las aceras. Los patrulleros pasaban, pero no hubo control.

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