Por primera vez, se exhibirá al público el pesebre del monasterio de El Carmen Bajo. Este belén ha permanecido resguardado durante 306 años por varias generaciones de las religiosas Carmelitas.
Desde el jueves hasta el 6 de enero, del próximo año, las puertas del monasterio se abren para los visitantes. Ellos podrán apreciar la belleza y el arte de las más de 500 piezas que recrean el nacimiento de Jesús.
La obra se encuentra en el segundo piso del monasterio, ubicado en las calles Venezuela y Olmedo, en el Centro Histórico.
Cada pasaje bíblico recrea los misterios del nacimiento del Niño Jesús, con rigurosidad en sus detalles y personajes. Cada pieza es el reflejo del esplendor de la Escuela Quiteña, que con habilidad y delicadeza representa a diversos personajes, unos son bíblicos y otros quiteños.
En Quito, la costumbre de instalar nacimientos viene desde tiempos coloniales. Es una tradición cultural y religiosa. En casas particulares, en conventos y comunidades religiosas se esmeraban por hacer el pesebre.
El belén Carmelito fue mostrado al público por última vez hace más de tres siglos.
Este año se volverá a mostrar gracias a la disposición de la congregación de las religiosas Carmelitas y a la gestión del Municipio de Quito, a través del Instituto Metropolitano de Patrimonio y la empresa Quito Turismo.
La muestra estará abierta de martes a domingo, de 09:00 a 12:00 y de 14:00 a 17:00.
La contribución sugerida en las entradas es de USD 2.
Para obtener más información sobre las visitas se puede comunicar con la empresa Quito Turismo, al teléfono 2 993-300 extensiones 1018 y 1010.