La Mariscal está expuesta a niveles de ruido que bordean los 75 decibeles, según la Secretaría de Ambiente

En la foto, la Plaza Foch, en La Marisca, centro - norte de Quito. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

En la foto, la Plaza Foch, en La Marisca, centro - norte de Quito. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

En la foto, la Plaza Foch, en La Marisca, centro - norte de Quito. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

El tránsito vehicular, el comercio, los establecimientos de diversión e incluso el paso de peatones son factores que contribuyen a la emisión de ruido en una ciudad.

El Texto Unificado de Legislación Secundaria de Medio Ambiente (Tulsma) determina que los gobiernos autónomos descentralizados, cuya población sea mayor o igual a 250 000 habitantes, deben elaborar mapas de ruido ambiental. Estos concebidos como una herramienta estratégica para la gestión del control de la contaminación acústica y la planificación territorial.

Por ello, durante más de un año, la Secretaría de Ambiente del Municipio de Quito trabajó en la elaboración de un mapa estratégico de ruido, en uno de los sectores más expuestos a esta problemática: La Mariscal.

La Secretaría de Ambiente elaboró un instructivo de aislamiento acústico para reducir la contaminación por ruido. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Para poder tener un conocimiento real sobre el ruido, los técnicos de esta entidad recopilaron información cartográfica, curvas de nivel, geomorfología, información catastral y tránsito vehicular de ese sector y a través de un software de modelamiento acústico se pudieron obtener algunos resultados.

Santiago Andrade, director de Gestión de Calidad Ambiental de la Secretaría de Ambiente, explica que a través de este mapa de ruido se pudo identificar que el lugar con mayor exposición a altos niveles de ruido en La Mariscal es la Plaza Foch.

En esa zona el rango de ruido se encuentra entre los 70 a 75 decibeles en el día y en horario nocturno (21:00 a 07:00) los niveles siguen siendo altos llegando a los 70 decibeles.

Además, el mapa permitió identificar algunas calles de la zona La Mariscal que se encuentran expuestas a altos índices de ruido. Estas son: avenida 12 de Octubre, Patria, Colón, 10 de Agosto, 6 de Diciembre y Orellana.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los niveles de ruido no deben sobrepasar los 60 decibeles para no causar afectaciones en la salud de la ciudadanía.

El tránsito vehicular, el comercio, los establecimientos de diversión e incluso el paso de peatones son factores que contribuyen a la emisión de ruido. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

Con el fin de reducir la contaminación por ruido, la Secretaría de Ambiente elaboró un instructivo de aislamiento acústico como una estrategia para que los establecimientos de diversión contribuyan a la reducción de los niveles.

Andrade señaló que por ahora se está socializando el documento con los propietarios de esos establecimientos, pero que en un plazo deberán cumplir con la normativa.

La Secretaría además realiza controles aleatorios de emisión de ruidos en diferentes puntos de la ciudad.

Por ejemplo, en el Centro Histórico, se socializó con los dueños de locales comerciales sobre el uso inapropiado de parlantes en el espacio público.

"Vemos que algunos lugares para promocionar sus productos sacan parlantes cada uno con un volumen más alto y esto la gente debe saber que no está permitido", mencionó el funcionario.

El próximo mapa de ruido que estará disponible para conocer los niveles de contaminación acústica será el de la administración zonal Eugenio Espejo, que comprende el centro de la urbe.

La ciudadanía puede realizar denuncias por emisiones elevadas de ruido en la Secretaría de Ambiente.

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