El bombero Josue Aizaga (centro) fue sometido a siete intervenciones quirúrgicas durante su estadía en Estados Unidos. Foto: Paúl Rivas
A las 23:50 de ayer, miércoles 23 de diciembre, llegó al aeropuerto Mariscal Sucre de Quito, Josue Aizaga. El bombero, de 21 años, enfrentó quemaduras en el 65% de su cuerpo, tras intentar sofocar un incendio forestal en Puembo, una parroquia al oriente de la capital. Anoche lo recibieron unos 60 familiares, 50 miembros del Cuerpo de Bomberos de Quito y el alcalde de la ciudad, Mauricio Rodas.
El cadete apenas llevaba ocho meses en la institución. Otros tres compañeros fallecieron; él fue trasladado de emergencia al hospital estadounidense Shiners Hospitals for children- Galveston.
En ese centro especializado en quemaduras y cuya sede está en Houston-Texas, Aizaga permaneció por cuatro meses. Allí, se sometió a siete intervenciones quirúrgicas. También tuvo un tratamiento permanente que aún no termina, pero por los buenos resultados, los médicos le dieron de alta el martes. Además, le otorgaron el permiso de regresar a Ecuador. Aizaga llegó a la terminal aérea de Tababela a las 23:50. Treinta minutos después salió caminando por la puerta de arribo internacional. Él estaba uniformado.
Sus familiares vestían camisetas rojas con su fotografía y la frase “caballero de fuego”. Cincuenta bomberos formaron una calle de honor y cuando vieron a su compañero alzaron sus hachas como símbolo de reverencia. Rodas se acercó y lo abrazó. Le dio gracias por el valor mostrado durante los incendios de verano y reiteró su apoyo incondicional para la recuperación completa. Con voz baja agradeció a todos sus familiares y a las autoridades. Espera recuperarse pronto y volver a ser uno más de los casacas rojas.
Romulo Caicedo, su tío, lo recibió. En sus ojos y cabello aún permanecen las secuelas que dejaron las llamas. Él deberá ingresar nuevamente al quirófano en marzo del 2016. Hasta esa fecha permanecerá en Ecuador y luego viajará a Estados Unidos de nuevo. Hasta mientras solo aseguró estar feliz de pasar Navidad con su familia en Checa, lugar en donde vive junto a su madre y padre adoptivo.
A las 10:30, en el Salón de la Ciudad, Josué Aizaga será condecorado con la medalla cruz de octubre, insignia que es otorgada a elementos destacados de los bomberos.