Varios neumáticos ardían sobre el pavimento de la vía Interoceánica. En la mañana de ayer, los vecinos del sector de La Primavera, en Tumbaco, protestaban en contra del proyecto de ampliación de esta avenida, el cual incluye la expropiación de varios lotes.
El tránsito vehicular fue interrumpido en ambos sentidos de circulación. Las filas de autos se extendieron por cientos de metros. Varias personas que viajaban en transporte público optaron por cruzar a pie por el lugar del plantón. Los conductores se desviaron hacia otras calles secundarias. En las rutas alternas como la vía a Lumbisí y la de la Cervecería el tránsito también se complicó por la estrechez de las calles y la gran cantidad de autos. Enormes filas de carros se armaron en las vías aledañas a Cumbayá, como la que enlaza a SanJuan Alto, la Francisco de Orellana y hacia los túneles Guayasamín.
Vehículos de transporte pesado y buses también circularon por la estrecha vía a Lumbisí, lo cual dificultó las maniobras de otros conductores y agravó el trancón. La velocidad promedio era de 4 km/h. No hubo control de la Policía en las vías alternas.
En la vía Interoceánica, dirigentes locales y vecinos exigían la presencia de las autoridades de la Empresa Metropolitana de Obras Públicas y de la Alcaldía.
Eduardo Calderón, comisario metropolitano de Tumbaco, explicó que se efectivizaba una orden de ocupación de tres predios del lado sur de la avenida Interoceánica. “La orden es del Juzgado Décimo Primero de lo Civil”. Acotó que la expropiación y ocupación de estos lotes es parte de los procedimientos para el proyecto de ampliación de la vía, que ejecuta el Municipio de Quito. La obra incluye tres intercambiadores y un tramo de ampliación.
Los moradores formaron un cerco alrededor de los inmuebles. Entre empujones y reclamos, los dueños de los predios fueron retirados del lugar por la Policía. Un pelotón de unos 60 uniformados acordonó el área, mientras dos tractores derrocaban el cerramiento del primer inmueble.
Ahí, viven Kléver Muñoz y otras cinco personas. Aseguró que no se opone al proyecto vial pero reclama un trato y un precio justo por su terreno. “Quieren pagar USD 80 por metro cuadrado, cuando en el valor real es de USD 200. Hay intereses de empresas privadas de por medio”. Hasta el día de ayer no había recibido el pago ofrecido por su predio.
Humberto Carreño, vocal de la Junta Parroquial, aseguró que no existen las condiciones físicas para desarrollar un proyecto integral de ampliación.
Según el dirigente, la Junta Parroquial emitió una resolución en la que se pide al Cabildo que se suspenda el proyecto de ampliación de la Interoceánica. La idea –acotó- es que primero se termine la construcción de la Ruta Viva y luego se realicen estudios de tráfico para definir posibles intervenciones en la Interoceánica.