Nuevos fotorradares efectuarán operativos de control de velocidad en diferentes sitios de la ciudad. Foto: Archivo /EL COMERCIO.
El control de velocidad con fotorradares se ampliará en Quito. Desde este martes 1 de marzo, 10 nuevos dispositivos empezarán a sancionar a quienes superen los índices de velocidad permitidos.
La Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) informó mediante su cuenta de Twitter @AMTQuito, que el objetivo del uso de estos equipos no es sancionar, sino prevenir accidentes.
Los fotorradares nuevos estarán ubicados en las avenidas Mariscal Sucre (cuatro), Ruta Viva (cuatro) y Panamericana Norte (dos). Estos se sumarán a los ocho equipos que están instalados en la avenida Simón Bolívar, desde junio del 2015.
Las avenidas donde están instalados estos equipos son de circulación rápida. En estas, los conductores de vehículos livianos deben circular hasta 90 kilómetros por hora. Los choferes de automotores pesados y buses deben ir a 70 km/h.
Si se superan estos rangos y los fotorradares fijos identifican la infracción, los dueños de los carros deberán pagar multas de USD 109,8 si los conductores no sobrepasaron los 120 km/h, pero si circularon a más de 120 km/h la sanción será de 366. En estos casos no se reducen puntos a la licencia de conducir.
Según la norma de Tránsito, cuando una infracción es detectada por un equipo tecnológico se aplican solo multas pecuniarias. No hay reducción de puntos ni prisión para los conductores. La infracción recae sobre el propietario del vehículo.
Los radares fijos detectan las placas del automotor con el que presuntamente se cometió la infracción. No identifican al conductor. En las notificaciones se incluye una prueba de la falta cometida.
En el caso de no estar de acuerdo se podrá apelar hasta después de tres días de haber sido notificados, en los juzgados de Tránsito.