La intervención vial en la av. Colón, entre la 6 de Diciembre y Yánez Pinzón, en Quito, arrancó desde la segunda semana de marzo de 2023. Jorge Salinas tiene presente la fecha porque la obra llegó con la disminución de clientes en el restaurante que fundó hace 18 años.
Salinas, de 74 años, apoya las obras en la ciudad, pero cuestiona la tardanza y, dice, sin tomar en cuenta las afectaciones. Reprocha también que, en el caso del tramo donde está su negocio, solo trabajen ciertos días y, por ende, que la intervención no concluya.
En la plaza Artigas, en el inicio oriental de la av. Colón, se encuentra un letrero que indica que la intervención contempla 2 kilómetros y un plazo de 180 días.
En el tramo entre la 12 de Octubre y 6 de Diciembre, los trabajos están avanzados casi en su totalidad.
En el segmento que colinda con el local de Salinas, en cambio, la constante es el polvo y el lodo, según el tiempo, así como las pocas ventas. Como cuenta el hombre, apenas se recuperaban del impacto de la pandemia y volvieron los días sin clientes.
En las mañanas y a la hora de almuerzo ya cubrían el aforo de 90 personas. Actualmente, no llegan ni a la mitad. Este panorama derivó en la reducción de personal, de 12 a ocho. “Son cuatro familias que se quedaron sin un sustento”, exclama el comerciante.
Según la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), en la av. Colón, los trabajos están suspendidos por tareas que desarrolla la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps). Una vez que estas concluyan retomarán las brindas, aseguraron.
Otro frente de obras
El panorama de la Colón, en el centro norte de Quito, se replica en la calle Ramírez Dávalos, en el tramo entre la Versalles y la av. 10 de Agosto.
Yolanda Burbano, quien desde hace 15 años es parte de una sociedad que impulsa un bazar y venta de artículos tecnológicos, indica que los trabajos arrancaron el 4 de mayo de 2023. El 15 del mismo mes, las labores pararon.
“La gente ya no pasa por aquí”, exclama mientras barre la acera cubierta del polvo que se levanta en la vía, donde se retiró el asfalto. En un día movido, las mujer, quien comparte los gastos y ganancias del local con dos familiares, vendía unos USD 100.
Con el cierre de la vía, “muchas veces me voy en cero”, menciona la mujer, cuyo negocio abre de 09:00 a 18:00. El Día de la Madre fue una fecha anhelada para, como cada año, vender arreglos hechos con chocolates y otros artículos. En este 2023, ella elaboró 60 y “no vendí ni uno”. La calle estaba desierta.
En la Ramírez Dávalos, las obras sí avanzan entre la Versalles y Ulloa. En el proyecto total contempla el arreglo desde la 10 de Agosto y América, en una longitud de 0,39 kilómetros.
De acuerdo con las fuentes de la Epmmop, los trabajos están dentro del cronograma establecido, que es de 30 días. Sin embargo, el clamor de personas como Burbano es preciso: que terminen pronto. Ella y sus socios, incluso, han pensado cerrar.
De acuerdo con la entidad municipal, en los distintos puntos de Quito hay 35 frentes de obras. En el sur son 17 y es la zona con más intervenciones en curso.
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