Otro ciclo de formación en el Circo Social

Malabares, acrobacias, y otras destrezas se aprenden en el Centro Histórico de la ciudad. Son 70 chicos que integran el Circo Social. Y, hasta el 15 de este mes, estará abierto un nuevo proceso de inscripciones.

El patio de una casa patrimonial es el espacio para los ensayos. Está en las calles Chile y Benalcázar. En la propuesta, que está a cargo de la Fundación Patronato San José, no solo se trabaja en las artes circenses. Nilka Pérez, directora de la institución, señala que a los chicos se les da un acompañamiento en temas psicológicos y también familiares.

Los talleres son gratuitos y se dividen en semilleros 1 y 2 y el elenco del Circo Social. A decir de Pérez, una de las metas cumplidas es que los chicos tengan una microempresa cultural y tengan ingresos generados por sus presentaciones.

Cristhian Naigua, de 21 años, se unió al proyecto hace cuatro. Actualmente, cursa una tecnología en artes circenses en Brasil. Como cuenta, la formación en la escuela del centro es una base para arrancar en la profesión, pero los chicos que quieren especializarse deben seguir preparándose.

En estos primeros pasos, en el circo hay tres profesores. Uno de ellos es Álvaro Soto, de 24 años. Él se encarga de la parte teórica, de la metodología.

Al grupo pueden unirse personas de entre 15 y 29 años. Las inscripciones son de 08:00 a 16:00. También, hay talleres permanentes de danza, guitarra, pintura… en las casas Metro (sedes de la Fundación), en distintos puntos de Quito.

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