Este museo y espacio de difusión cultural fue uno de los grandes sueños del pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín. En él se busca plasmar al hombre latinoamericano, desde lo precolombino hasta lo contemporáneo. Se trata de un complejo arquitectónico en el cual se evidencia, a través del arte, la lucha de los latinoamericanos.
En el terreno de cerca de 20 000 m² se levanta esta construcción de más de 15 000 m². Allí reposa una gran colección de arqueología, arte colonial y arte contemporáneo, junto a la obra del maestro Guayasamín. Al costado occidental de la edificación se hallaron 14 tumbas preincásicas, que forman parte del recorrido por el lugar.