Caos vehicular en la avenida Simón Bolívar

Tráfico vehicular.Ayer, la fila  de vehículos  se extendió desde La Forestal hasta el sector de la Loma de Puengasí.

Tráfico vehicular.Ayer, la fila de vehículos se extendió desde La Forestal hasta el sector de la Loma de Puengasí.

El trajín de los trabajadores y de la maquinaria pesada dejó secuelas ayer en la av. Simón Bolívar. Largas filas de vehículos se formaron desde primeras horas de la mañana hasta la tarde. El trancón fue más complicado en el sector de La Forestal, en el sur. Allí, de los seis carriles, solo están habilitados tres para el tránsito vehicular.

Para Julio Altamirano, quien a diario recorre en su vehículo por esa avenida, la congestión es común y más todavía cuando llueve, como ayer. “Ahora me demoro más, es una pasadera de tiempo. Me imagino que es por las obras”.

La Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), ejecuta los trabajos de mejoramiento de la avenida Simón Bolívar, entre la Maldonado y la Vía Interoceánica. Se realizan obras de repavimentación, construcción de túneles a desnivel, puentes peatonales, estabilización de taludes, bordillos y arreglo de miradores.

Entre San Martín y el intercambiador que va al valle de Los Chillos, se realizan seis obras que alteran el tránsito vehicular (la construcción de dos muros de contención, dos excavaciones, mejoramiento de parterres, rehabilitación de cunetas).

En el sector de San Martín, unos conos anaranjados y un rótulo con la frase “Hombres trabajando” advierten a los conductores de no usar el carril derecho, en sentido sur-norte. Allí, cinco obreros construyen un muro de contención. Grandes bolas de tierra descienden por el talud hasta llegar a un costado de la vía. Por esa razón, se restringió la circulación vehicular por un carril.

Más adelante, en San Carlos del Sur, un rótulo advierte un desvío. Los conductores que van al norte toman un atajo, porque la Simón Bolívar está totalmente cerrada. “Estamos construyendo una cuneta para que corra el agua”, comenta Jefferson Castellano, obrero. Los peatones también están en riesgo. Allí no hay señalización ni policías que organicen el tráfico. “Hay mucho caos, no hay cómo movilizarse”, dice Clara Armijo, moradora del sector, quien cruza la avenida corriendo.

En el sentido contrario de la avenida hay un solo carril habilitado. Tanques amarillos y conos anaranjados delimitan el camino que deben seguir los conductores que vienen del norte. En el sitio se realiza una excavación para costruir un paso a desnivel.

En San Luis de Miravalle, el carril izquierdo, en sentido norte- sur, está cerrado. Los obreros están construyendo un muro para evitar que los peatones crucen por el parterre.

Al llegar a La Forestal, los conductores que van hacia el sur pueden usar solo dos de los tres carriles. La maquinaria pesada ocupa el resto del espacio. Alexis Vélez, ingeniero encargado de la obra, explicó que allí se van a colocar dos capas de asfalto caliente. “Es recomendable que circulen a 40 km por hora”. En el sector hay gravilla y desniveles en la calzada. Otro punto de congestión vehicular se forma a la altura del paso peatonal del mismo sector.

Desde el lunes empezaron las excavaciones para construir un paso a desnivel. El sentido sur norte de la vía fue cerrado. Los conductores deben invadir un carril, que es para la circulación en sentido contrario. Esto causa la formación de las filas de carros.

“Antes, de Chillogallo a Cumbayá nos demorábamos dos horas y ahora hacemos tres o cuatro”, comentó Juan Piedra, conductor. Jorge Cevallos, estudiante, ahora se demora más en llegar a su casa, todos los días.

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