‘En un mes se iniciarán los cursos de recuperación de puntos en las licencias”. Esas fueron las palabras del director ejecutivo de la Agencia Nacional de Tránsito, Mauricio Peña, durante una rueda de prensa, el pasado 23 de abril. Los 30 días del anuncio se cumplieron, pero aún no se conocía el resultado del procedimiento que facultaba a las escuelas de conducción a impartir los cursos requeridos.
El incumplimiento en el plazo para la apertura de los talleres para la recuperación de puntos en la licencia de conducir fue el argumento que sostuvieron los dirigentes y choferes profesionales del transporte urbano de Quito para interrumpir el servicio, en la mañana del jueves.
De manera sorpresiva, los transportistas paralizaron sus unidades de transporte ante la queja y desesperación de cientos de usuarios que tuvieron dificultades para movilizarse a sus lugares de destino.
El parque El Arbolito, nuevamente fue el punto de concentración. Desde ahí partió una marcha hacia el Centro Histórico. La consigna era reclamar por la tardanza en la apertura de los cursos para recuperación de puntos. Según cálculos de la Cámara de Transporte de Pichincha, la mitad de los 5 000 choferes involucrados en el transporte público estaría laborando con cero puntos en las licencias. Eso derivó en denuncias sobre extorsión y abuso de malos elementos de la Policía.
Pocos lograron llegar hasta la Plaza Grande. Un cerco de 150 policías cercaron los alrededores de la plaza. Los manifestantes reaccionaron con gritos y agresiones. Los policías respondieron con gas lacrimógeno. La circulación vehicular y peatonal quedó restringida y el comercio, afectado. Para Peña, el procedimiento adoptado por los dirigentes de un grupo pequeño de operadores de transportes de Quito fue injustificado.
“Ellos fueron informados sobre el proceso de calificación de las escuelas de conducción para que se conviertan en centros de recuperación de puntos”.
Una comitiva de los transportistas fue recibida por el viceministro del Interior y tras más de una hora se logró un acuerdo. El servicio de transporte se normalizó en la tarde y llegó con un comunicado de prensa de la Agencia Nacional de Tránsito, en el cual se anunciaba recién el avance en el proceso.
“Independiente de este proceso, en los próximos días contrataremos una auditora para que se realice una evaluación de todas las escuelas de conducción para determinar si estas cumplen con los requisitos mínimos establecidos en la ley y el reglamento”.
A pesar de que aún falta ese paso, informó que máximo en 15 días se iniciarán los cursos. Está pendiente realizar una categorización de escuelas, las clase A serán las que cumplan con todos los requisitos.
Mientras la comitiva de los transportistas se reunía en el Ministerio del Interior con el viceministro de Seguridad, Xavier Córdova, en búsqueda de un acuerdo, Peña no se pronunció sobre la paralización del servicio, que es sancionado por la Ley de Tránsito. Solo horas después dijo que la actitud de los choferes no fue la mejor y que iba a sancionar a las cooperativas que paralizaron sus actividades.
Y aprovechó la oportunidad para referirse al tema de los chalecos de los motociclistas e hizo un anuncio inesperado: “queda suspendida temporalmente la obligatoriedad de usar el chaleco”. Peña también dijo que devolverá a la empresa proveedora los chalecos que están en bodega, sin precisar cuántos ni referirse al examen que realizó Contraloría sobre la contratación de la compra de las prendas, que determinó anomalías.
Lo que dijo
El 23 de abril anunció que en un mes se abrirán los cursos para la recuperación de los puntos en las licencias. Además, dijo que se establecerían los calendarios para la organización de los talleres.
Lo que hizo
No cumplió con el plazo que él mismo puso y eso generó la molestia de un grupo de transportistas que en la mañana del jueves caotizó el tránsito en el Centro Histórico de Quito.
Su experiencia
En noviembre del 2011 fue nombrado Director de la Agencia Nacional de Tránsito. Ha estado vinculado al Gobierno como viceministro de Coordinación de la Producción, Empleo y Competitividad.