El alcalde Mauricio Rodas en la procesión de Jesús del Gran Poder en el sur de Quito. Foto: EL COMERCIO
Cerca de 30 000 personas vieron la procesión de Jesús del Gran Poder del sur, según los primeros datos que manejan los organizadores. En esta caminata religiosa se preservan elementos tradicionales del siglo XVIII.
El alcalde de Quito, Mauricio Rodas, participó de la procesión y fue nombrado miembro de la agrupación Jesús del Gran Poder, que se encarga de coordinar la celebración de este rito católico. Él confesó que tiene “uno que otro (pecado) por ahí, como todo ser humano”.
Pero su presencia no era para pedir perdón por los pecados. Él fue invitado por los organizadores que explicaron que, en la época colonial, el Alcalde era un personaje importante dentro de la procesión.
El Alcalde, que estuvo cerca a la imagen de Jesús del Gran Poder, aprovechó para pedir bendiciones para la ciudad. “Que Dios guíe los pasos de todos los quiteños para juntos construir una ciudad en la que todos podamos mejorar nuestra calidad de vida. Vidas largas, productivas y plenas”.
Cerca de 500 cucuruchos, 100 verónicas y cuatro bandas musicales participaron de la caminata católica, que se ha desarrollado durante 18 años. En este sector de la ciudad hay tres personajes que llaman la atención: el Turbante de Chimbacalle y las alma santas de Cuenca y Patate. Son símbolos que se conservan desde el siglo XVIII explicó Hugo Núñez, iniciador de esta tradición.
Las personas se concentraron en las calles Natalia Vaca y Puruhá, en la iglesia de la Virgen de El Quinche, en el barrio La Unión.
Pasaron por la calle Zaruma, continuaron por la Mariscal Sucre hasta la avenida Michelena (ahí se unió el Alcalde a la caminata) y tomaron la avenida Teniente Hugo Ortiz.
Continuaron por la calle Collaguazo y retornaron a la iglesia en La Unión. Cerca de 1000 policías custodiaron la ruta, y sus inmediaciones, para evitar incidentes.