Las calles y parques de Quito se llenaron de ciclistas y caminantes en la mañana del último día del feriado por Semana Santa. El parque La Carolina fue un punto de encuentro para los quiteños y habitantes de la ciudad que no viajaron hacia un destino turístico
En esta área de recreación, ubicada en el norte, jóvenes y niños recorrieron los espacios con patines o bicicletas. Detrás de ellos caminaban sus padres o algunos de sus familiares. La alegría era evidente por lo que hacían.
La práctica de deportes y las salidas familiares dentro de la urbe fueron las actividades preferidas por los quiteños durante los tres días de feriado. Por los senderos de La Carolina, el ir y venir de los atletas era constante, incluso a ratos se formaban pequeñas congestiones entre los deportistas.
Pablo Galeano y Edwin Lema entablaron una charla después de correr varios kilómetros alrededor este espacio verde, uno de los más importantes de la urbe. “Estamos practicando para competir en varias carreras que están programadas este año. No parece que es feriado. Mucha gente ha venido al parque, en otras ocasiones ha venido menos gente”.
Lema señaló que hacen falta más seguridad en la ciudad durante los días de asueto. “La inseguridad crece porque la gente sale y los controles en la ciudad parecen disminuir, lo que facilita los asaltos y robos”. El tiene una sensación de una ciudad más peligrosa tanto en el día como en la noche, por lo que pide más presencia y accionar policial.
Los niños también aprovecharon para realizar actividad física junto con sus padres. Sofía Beltrán de 10 años patinaba junto con su hermano Jordan de 8. “En nuestra casa no tenemos espacio para jugar. Aquí jugamos, corremos y patinamos sin preocuparnos”, aseguró la niña.
Las canchas deportivas estaban copadas. Los equipos de basquetbol se armaron y los encuentros entre los equipos duraron horas. Cristian Soto y su primo Daniel Altamirano jugaron tres partidos con diferentes equipos. La actividad duró más de dos horas.
“Es mejor venir a jugar en feriado porque hay menos gente. Los fines de semana regulares no encontramos con facilidad donde jugar”, dijo Soto.
El ciclopaseo también tuvo concurrencia ayer. Diego Barahona recorrió la ruta desde los Parques del Recuerdo, en el norte hasta la Plaza Grande, en el Centro.
“No pensé que iba haber tanta gente. En los feriados por los general salimos pocas personas al parque. Además el clima ayudó para hacer deporte. Fue un día muy fresco”.
En otros sectores
Los restaurantes de la ciudad que abrieron sus puertas tuvieron una alta demanda. Esto fue evidente, principalmente, a la hora del almuerzo.
Pese a la reducción del flujo vehicular se presentaron congestiones en algunos sitios de la ciudad. Esto, por ejemplo, ocurrió en la avenida Simón Bolívar y en el peaje de la autopista General Rumiñahui. Las lluvias fueron la principal causa.
Otro sector de la ciudad que tuvo un alto flujo de visitantes fue el Centro Histórico. Visitantes locales y nacionales y extranjeros recorrieron iglesias, museos y predios patrimoniales. La presencia de las policías Nacional y Metropolitana fue visible hasta pasadas las 22:00.