‘Mujer, no importa la edad para aprender a montar bici, entre carishinas aprenderemos esta divertida forma de movilizarse”, decía en voz alta Elena Romero, del colectivo Carishinas en bici, formado hace tres años y que agrupa a unas 80 mujeres.
Durante sus reuniones se les ocurrió un proyecto para las mujeres que por su edad, falta de tiempo o dinero no aprendieron a manejar una bicicleta.
El proyecto se aplicará hasta septiembre. El primer encuentro se realizó el pasado fin de semana, en el parque La Carolina.
Hasta ese lugar llegaron 50 mujeres, que con anticipación llenaron un formulario por Internet, para ser ahijadas. Sus madrinas serán las encargadas de enseñarles a ciclear, normas de seguridad vial y mecánica básica.
Una ahijada es Karla Pazmiño, de 29 años. Ella contó que en su infancia sufrió un accidente cuando su hermano mayor le enseñaba a ciclear. “Vivíamos en Miraflores y después de algunas clases, él me animó a bajar por la calle Río de Janeiro. Perdí el equilibrio y me caí. Me rompí el brazo”, recordó.
Esa experiencia hizo que Pazmiño no se volviera a subir a una bicicleta. 21 años después, una amiga de la universidad la convenció para participar de este proyecto. La propuesta es incentivar el uso de estos vehículos, como medio de movilización alternativo en la ciudad.
Cada reunión dura tres horas. Se realizan dinámicas para que madrinas y ahijadas se conozcan. Ya están formadas 50 parejas y cada madrina puede tener hasta tres ahijadas. Estas últimas están agrupadas en niveles: quienes nunca han conducido una bicicleta, quienes participan en el ciclopaseo y quienes ciclean por las vías y aún tienen miedo.
Los encuentros serán el primer domingo de cada vez. Al final habrá una graduación.
El proyecto
Cicleadas . Madrinas y ahijadas pueden participar de los paseos nocturnos por la ciudad.
Las inscripciones. Se las realiza a través de la red social Facebook Carishinas En Bici.
La graduación. En septiembre se graduarán 50 ciclistas urbanas. Se abre cada tres meses.