Las 15 miniterminales que funcionan en la zona urbana dejarán de ser una opción para los viajeros. Desde hoy, 30 de junio, en estos sitios está prohibido embarcar y desembarcar pasajeros. Quienes quieran ir a provincias deben acudir a las terminales de Quitumbe y Carcelén.
Uno de los objetivos que tiene esta medida, es reducir los impactos en la movilidad. Son 410 unidades que dejarán de circular en el centro norte.
La Resolución 001 de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), emitida en enero pasado, establece que, a partir de hoy, las instalaciones físicas de las operadoras de transporte que funcionen fuera de las terminales terrestres deberán ser utilizadas únicamente como oficinas administrativas.
En estas se podrá mantener la venta de boletos, previo a un trámite. Los cerca de 8 000 usuarios que se movilizan a diario desde estos sitios tendrán que buscar alternativas.
Para Guadalupe Jaramillo, quien cada mes viene desde Esmeraldas a Quito, el cierre de este servicio le resultará complicado. Usualmente ella tomaba un bus desde su provincia y se bajaba en la parada de las calles 18 de Septiembre y Manuel Larrea, en el centro-norte. La miniterminal le quedaba cerca del hospital.
Desde ahora, ella deberá modificar los horarios de sus citas y su rutina. El traslado de Quitumbe a Santa Prisca, en un trolebús, podría durar hasta una hora. “Será doble viaje”.
Antonio Bone, morador de Santa Prisca desde hace 15 años, espera que la salida de estos buses del sector ayudará a reducir la congestión vehicular. Pero será más complicado movilizarse a provincias y afectará a los negocios cercanos.
Sin embargo, en la ANT se aspira que esta acción contribuya a controlar de una mejor manera a las operadoras, unidades y conductores. En las terminales terrestres, personal de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) y la Policía Nacional realizan chequeos previos de la documentación de los choferes, pruebas de alcoholemia y el estado de los automotores.
El movimiento que se genera en el entorno también cambiará. Usualmente en estas empresas el ajetreo empieza desde las 04:00 y se extiende hasta las 23:30. Mientras los conductores que aguardan para salir usan los extremos de las calzadas como estacionamiento. En Santa Prisca, el pasado jueves a las 06:00 cuatro buses interprovinciales utilizaban la zona azul de la calle Portoviejo.
En la Santa María, Juan León Mera y la 18 de Septiembre la situación es similar. En esta última, un bus de la Coop. Reina estuvo estacionado durante una hora a un costado de la vía. Los transportistas de los buses de la Coop. Trans Occidentales que llegaban al lugar usaban todo el ancho de la vía para maniobrar e ingresar al parqueadero.
Las zonas aledañas a las miniterminales se han vuelto en centros de atracción de viaje. Los conductores de taxis y familiares de los pasajeros se concentran en estas zonas para tomar o dejar a sus parientes. Esto se evidencia en Santa Prisca, La Mariscal, El Condado y Quitumbe.
En las instalaciones de las miniterminales se ha optado por anunciar a los usuarios la resolución en afiches o gigantografías. En Trans Esmeraldas se entregaron trípticos. El viernes en la tarde, incluso, un grupo de funcionarios de la ANT y del Municipio visitó estos sitios para socializar la medida.
Ante esta situación, los transportistas se preparan para asumir este cambio. Ernesto Velásquez, presidente de la Coop. Occidentales, dijo que una vez que se cumpla el plazo, 70 buses de esta empresa dejarán de circular en la zona. “Estamos de acuerdo, siempre y cuando salgan todas”.
La ANT, la AMT y la Agencia de Control del Municipio harán controles para verificar que se cumpla esta disposición.
Para Cristóbal Buendía, presidente del Observatorio Ciudadano de Movilidad, esta resolución debe ir acompañada de soluciones para el desplazamiento de los viajeros. “El traslado hacia las terminales terrestres se encarecerá”.
Para Carlos Armijos, gerente de Terminales y Estacionamientos de la Empresa Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), se analiza habilitar una ruta exprés de El Ejido a Quitumbe y Carcelén, que partirían cada 30 minutos.
En las terminales terrestres se cuenta con la infraestructura necesaria para cubrir la demanda de pasajeros. A diario de estas parten 23 000 viajeros.
En contexto
La Agencia Nacional de Tránsito (ANT) emitió en enero una resolución para prohibir el traslado de pasajeros desde las miniterminales. El Municipio quiteño es partidario de la medida ya que reducirá vehículos que circulan por el centro-norte de la ciudad.