Desde las 17:50, los asistentes al partido entre Ecuador y Brasil empezaron a dejar las instalaciones del Estadio Olímpico Atahualpa. Los aficionados se marcharon con una mezcla de tristeza y enojo.
Terminado el juego, los aficionados buscaron la forma de regresar a sus hogares: el transporte público integrado y el regular fueron las alternativas.
En las afueras del estadio, personal de la Policía Nacional y de la Agencia Metropolitana de Tránsito resguardaron la salida de los aficionados. La avenida 6 de Diciembre se mantuvo cerrada, entre la avenida Eloy Alfaro y la avenida Gaspar de Villarroel. De acuerdo con los agentes, la restricción se mantendrá, al menos, hasta las 20:00, hora prevista para que el flujo de personas se reduzca.
El tramo de la Naciones Unidas, entre la República de El Salvador también permaneció cerrada. Por allí, los peatones se dirigieron hasta las avenidas De los Shyris y Amazonas.
Las unidades de la Ecovía circularon normalmente, este fue el principal medio de transporte para las personas que acudieron a pie hasta este escenario deportivo. Otros se desplazaron hasta las paradas de la avenida Naciones Unidas, cuyas unidades se dirigieron hacia el sur de Quito. Otros avanzaron hasta la avenida De los Shyris e incluso hubo quienes avanzaron hasta la Amazonas y la 10 de Agosto, esto último para abordar el Trolebús.
Para esto, efectivos de la AMT se ubicaron en el carril exclusivo para alternar el paso entre los aficionados que salieron del escenario y los buses.
Otras personas optaron por ingresar a los locales y centros comerciales que se encuentran en las cercanías del Estadio.