Una imagen de El Panecillo, en el Centro Histórico de Quito, donde muchos turistas buscan llegar. Foto: Víctor Muñoz / EL COMERCIO
El objetivo es que los turistas que visitan el Centro Histórico de la capital cuenten con un sendero que los lleve desde la calle García Moreno hasta la cima de El Panecillo. Al momento, esta emblemática elevación cuenta con problemas de inseguridad, basura en las vías de acceso y descuido en los espacios públicos.
Antonio Salvador, director de Planificación estratégica urbana del Instituto Metropolitano de Planificación Urbana (IMPU), explica que justamente para atacar esos problemas se lleva a cabo un proyecto que se desarrollará en tres etapas. La primera, que tendrá una inversión referencial de USD 1 millón, deberá estar lista hasta abril del 2019.
Salvador indica que de manera general se va a mejorar la circulación peatonal, se trabajará en las escalinatas, se las reformará e iluminará para mejorar la seguridad. Asimismo, se generarán más zonas verdes, parques y canchas. Esto con el objetivo de transformar la cima en un parque y en un espacio más recreativo. Esta semana hicieron un recorrido con la Secretaría de Ambiente para identificar especies nativas de la zona y sembrarlas a lo largo del sendero.
La iluminación será parte importante del proyecto. La propuesta contempla que en ciertos espacios como plazoletas y escalinatas se ilumine con la técnica del mapping.
La fase 1, cuyos estudios finalizarán la semana entrante, se llevará a cabo en cinco tramos. El primer tramo empieza en la calle García Moreno y se extiende hasta la Aymerich. Se trabajará sobre la escalinata existente. Se mejorará la iluminación, la vegetación y se habilitará el mirador de la zona de modo que el visitante pueda ascender a la cima por ese lugar.
En el tramo dos se intervendrá en el polvorín. Se va a mejorar el entorno peatonal en la calle Aymerich haciendo una plataforma única de modo que las aceras y la vía queden al mismo nivel, como al momento ocurre en la calle Venezuela.
Además se generarán nuevos puntos de encuentro. El tramo tres se ejecutará en un terreno baldío que pertenece al Municipio y que se une con una serie de plazoletas. Allí se habilitará un nuevo sendero para que el turista cruce el sector de manera segura. Se llamará el Paseo de los sentidos ya que se colocarán flores perfumadas y de colores llamativos para deleite del visitante.
Como parte del tramo cuatro y cinco, por pedido de la comunidad y de los comerciantes, se moverán algunas de las casetas y se las distribuirá de mejor manera.
Alberto Rosero, director subrrogante del IMPU, explica que en El Panecillo habitan 14 barrios y que una de las ventajas de este plan es que no sólo beneficiará al turista, sino a las cerca de 15 000 personas que viven en la loma y sus faldas.