44,7% de avance tiene la Plataforma Financiera

La edificación tendrá 130 413 m2 de construcción. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO

La edificación tendrá 130 413 m2 de construcción. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO

La edificación tendrá 130 413 m2 de construcción. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO

El entorno urbano cambió. La construcción de la edificación donde funcionará la Plataforma Financiera, en la av. Amazonas y Villalengua, en el norte de Quito, dio un giro visual a la zona.

La gran estructura metálica advierte que el cambio no solo será paisajístico, sino que se avecina un giro urbanístico y comercial que alterará la dinámica de la ciudad.

Es lo que Marco Córdova, profesor investigador de la Flacso, llama la estructuración de nuevas centralidades. Este sector norte de la capital se reafirmará como zona financiera, atraerá nuevos negocios y servicios y aumentará la afluencia de gente y vehículos, lo que incluso incidirá en la plusvalía.

El Servicio de Contratación de Obras (Secob), entidad que está a la cabeza del proyecto, explica que actualmente registra un 44,7% de avance.

La edificación estará conformada por ocho bloques de 13 pisos y hasta tres subsuelos. Tendrá locales comerciales, un auditorio, patios de comidas, mediateca, un centro médico, sala de capacitación y áreas verdes. Contará, además, con un estacionamiento con capacidad para 540 vehículos. En total, tendrá 130 413 m2 de construcción.

La Plataforma Financiera es uno de cuatro complejos que se construirán; dos están en ejecución. La otras es la Plataforma de Gestión de Desarrollo Social, que se levanta en Quitumbe, en el sur de Quito.

En la Plataforma Financiera laborarán 3 801 servidores públicos y se calcula que, en un inicio, la visitarán unos 15 000 usuarios al día. La construcción de la obra está a cargo de China Camc Engineering Co. Ltda. y el fiscalizador es EspeInnovativa.

Arrancó el 9 de septiembre del año pasado, tiene una inversión aproximada de USD 220 millones y su construcción ha generado
3 500 plazas de trabajo. Según la Secob, estará lista a fines de enero del 2017.

Martín Plaza, urbanista, asegura que otra de las ventajas de agrupar todas las entidades en una misma edificación es que se va a ahorrar tiempo en el traslado de los usuarios, facilitará la realización de trámites y aumentará el comercio.

Además, arquitectónicamente, la zona ganará, pues son edificios modernos y atractivos. También comerciantes y vecinos del sector esperan que cuando la Plataforma esté habilitada genere un desarrollo urbano y comercial de la zona.

Sin embargo, como toda gran obra, su construcción genera molestias. Vecinos y comerciantes se refieren al ruido y a la generación de polvo que, reconocen, se ha ido reduciendo con el avance de los trabajos. Cuando la obra se inició, la cantidad de luces que se utilizaba hacía que “en la noche pareciera que todavía era de día”, dice Cristina González, quien vive en un edificio enfrente.

Después de dos meses González se empezó a acostumbrar, aunque en ocasiones todavía se despierta. También se resignó a que con la construcción ya no tendrá la misma vista desde su departamento.

El tránsito que se forma en las tardes por el cierre de algunas calles es otro inconveniente. Un tramo de la vía para entrar a su casa se convirtió en doble vía. Él espera que terminen pronto los trabajos y que coloquen árboles y áreas verdes, “al igual como los lugares de esparcimiento y de servicios que anunciaron con el proyecto”.

Héctor Heredia, dueño de una ferretería, ve con agrado la rapidez y el avance de la construcción.

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