2012 y 2013, dos años con grandes incendios forestales
En el Parque Metropolitano, el 23 de septiembre 2013, 21 hectáreas fueron consumidas por las llamas. Foto: Archivo/ El Comercio.
Los dos últimos años, Quito ha soportado fuertes incendios en la temporada de verano, desde junio hasta septiembre, considerada como la época de verano o seca. Y, sobre esa base, las autoridades han implementado planes para evitar daños a las personas y a la naturaleza; pese a esto se han producido estas quemas.
En el 2012, el fuego consumió 3 796 hectáreas de espacios verdes. El Municipio, el 7 de septiembre del 2012, declaró la emergencia por los incendios que se registraron en el Distrito.
“En los sectores de Cumbayá y Tumbaco, las quebradas de estos sitios se convirtieron en senderos de fuego y las laderas empinadas impedían la operación de los vecinos y los bomberos”.
Ese mes de septiembre, el fuego no solo afectó a la naturaleza: cinco bomberos quedaron heridos mientras intentaban apagar las llamas durante la emergencia.
Un año después, en 2013, las autoridades trataron de evitar una situación similar o peor a la registrada el año anterior. USD 2,3 millones se destinaron para reducir incendios en verano. El Plan de Prevención de Incendios Forestales 2013 contempló prevención, vigilancia y respuesta. Por otro lado, las autoridades identificaron, en el Distrito, 57 zonas sensibles a siniestros.
- Pirómanos lanzaron bombas molotov para avivar incendio
- Falla eléctrica, primera causa de incendios
- Las quemas tradicionales de vegetación están prohibidas
- 50 hectáreas del bosque nativo se quemaron en Vilcabamba
- Se decretó la alerta naranja en Quito por los incendios forestales
Sin embargo, el 31 de julio ya se presentó una de las primeras emergencias en Guápulo y en el sector de El Trébol. Pero, sin duda, la mayor cantidad de daños se registró el sábado 23 de septiembre en el Parque Metropolitano: 21 hectáreas fueron consumidas por las llamas.
En septiembre, el trabajo de los bomberos se concentró en el Parque Metropolitano. También, en la quebrada del Auqui y en Calacalí, noroccidente.
El 26 de septiembre, 274 personas apagaron el fuego del cerro Auqui. 33 hectáreas fueron afectadas. Este incendio tardó cuatro días en ser controlado y movilizó a más de 274 personas. El área devastada en estos dos años fue el equivalente a 3 269 canchas de fútbol profesional.
Según datos del Cuerpo de Bomberos de Quito, el 95% de los incendios forestales fue provocado y las autoridades reiteraron que se sancionará con prisión a las personas que inicien los incendios.
Para este 2014, se han tomado iguales medidas para prevenir incendios forestales. Bomberos y guardaparques han recibido herramientas que les permitan actuar en caso de emergencia.