El incendio forestal sigue su curso en la parte alta del cantón y está afectado bosques, fincas, huertas y pastizales. Foto: Cortesía
Más de una semana de incendio forestal soporta el cantón Quilanga, ubicado al sur de la provincia de Loja. Por la magnitud de la quema y los daños ocasionados la tarde del domingo 8 de septiembre del 2019 se decretó la emergencia en todo ese territorio.
La Central ECU-911 de Loja recibió la llamada de emergencia el jueves 5 de septiembre, cuando las llamas –que se presume iniciaron en las partes altas de las parroquias lojanas de Vilcabamba y Malacatos– habían cobrado dimensiones incontrolables.
Desde entonces, el personal del Cuerpo de Bomberos de Quilanga trata de controlar el incendio. Tienen el apoyo de los bomberos de cantones vecinos de Loja, Saraguro, Espíndola, Calvas y Catamayo y de los Fuerzas Armadas y los comuneros de las zonas afectadas. Esta mañana se integró el Cuerpo de Bomberos de Cuenca y el helicóptero de la Policía de Azuay.
No se conoce cuántas hectáreas de pinos, fincas cafetaleras y agrícolas, pastizales y huertas se han consumido. Pero según el alcalde de Quilanga, Freddy Cueva, el incendio avanza unos 40 kilómetros en línea recta. Es una zona de difícil acceso en la cordillera y de fuertes corrientes de vientos.
Cueva teme por la vida de los campesinos que -por su propia cuenta y en la desesperación por evitar que las llamas acaben con sus cultivos– intentan apagar las llamas que alcanzan más de cinco metros de altura.
La Coordinación Zonal 7 del Ministerio de Educación dispuso la suspensión de clases para todos los planteles del cantón por temas de seguridad y salud. Es que el aire está completamente contaminado por el humo y no hay agua en algunos sectores por la afectación a las cuencas hídricas.