Funes fue el primer presidente de izquierda que llegó a dirigir los destinos de El Salvador apoyado por el exguerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN). Foto: AFP
Un tribunal judicial de San Salvador admitió el 20 de spetiembre todas las pruebas, periciales y documentales, por el delito de enriquecimiento ilícito presentadas por la Fiscalía General (FGR) en contra del expresidente Mauricio Funes y dos de sus familiares.
Funes, periodista de profesión y quien ejerció entre 2009 y 2014, se convirtió en el primer presidente de izquierda que llegaba a dirigir los destinos de la nación centroamericana apoyado por el exguerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
La FGR busca probar un posible enriquecimiento ilícito por más de USD 700 000 por parte del exmandatario, su hijo Diego y la exprimera dama Vanda Pignato, actual funcionaria en la gestión del exguerrillero Salvador Sánchez Cerén.
Funes se encuentra en la actualidad como asilado político en Nicaragua, donde el gobierno lo consideró perseguido político.
Funes reitera, a través de las redes sociales, que es inocente y que las “acusaciones son actos de venganza de la derecha oligárquica”, que fue despojada del poder político en 2009, cuando él llegó a la Presidencia. El tribunal o Cámara Segunda de lo Civil de San Salvador programó la audiencia probatoria (etapa final) contra el expresidente Funes para el próximo 15 de noviembre.
La Corte Suprema de Justicia de El Salvador (CSJ) ordenó el 9 de febrero pasado a la Cámara de lo Civil iniciar un juicio contra Funes, su hijo Diego y su exesposa Pignato, quienes no habrían justificado ingresos de más de USD 700 000 en los años de gestión del experiodista.
La FGR allanó más de 15 inmuebles, entre domicilios y oficinas, de Funes y algunos de sus allegados, lugares donde se decomisaron documentos legales, objetos y vehículos de lujo, supuestamente propiedades del exmandatario, su hijo y su ex esposa.