La prueba escrita complicó al maestro

Redacción Tulcán

En una de las aulas del Instituto Tulcán, 23 docentes rindieron la evaluación. Algunos gestos en sus rostros denotaban preocupación.  No faltó quien al disimulo haga señas a sus compañeros para que le ayude con alguna respuesta.
 
Ese fue el ambiente que se vivió el sábado durante las evaluaciones escritas a 404 docentes en Carchi.
Davis Díaz,  quien vigilaba la  evaluación, les pedía  que hagan silencio en repetidas ocasiones. Parecía que se trataba de un   examen rendido por    escolares, durante el cual el profesor insiste en que no se puede copiar. 

Dolores Pérez, profesora de la escuela José Joaquín de Olmedo, salió molesta. “Me fue mal en Matemáticas. Los ejercicios fueron muy complicados”. 
Guadalupe Imbaquingo, otra docente, manifestó que eran  ecuaciones que ellos no enseñan en primaria.  “Esos ejercicios se aplican a los alumnos de   secundaria”.   Esa fue la queja generalizada de los docentes que imparten clases en los planteles de  educación básica.

El sábado, la aplicación de las pruebas se  inició  a las 08:15 en las áreas de conocimiento, didáctica y pedagogía.

Beatriz Santillán, coordinadora  del proyecto de evaluación del desempeño del docente, señaló que durante la semana se realizaron  evaluaciones internas en cada plantel educativo.  “Ahí se calificó la forma en la que imparten las clases. Los padres de familia y alumnos también evaluaron a los profesores”.

Los resultados de las calificaciones se conocerán en tres meses. Santillán comentó que no llegaron a la parroquia de Tobar Donoso por las dificultades de acceso.  Esta zona no cuenta con carretera y se ingresa en  canoa o en helicóptero cuando hay relevo del personal militar.
A los profesores de esta zona se les evaluará en enero.
 
A su vez, hoy empieza la evaluación a 2 568 maestros del régimen Costa que no asistieron en la primera convocatoria. Se dejarán sin efecto los  sumarios administrativos en su contra.