Un grupo de repartidores motorizados reclaman un pago justo y la garantía de medidas e insumos de bioseguridad para realizador su trabajo. Foto: Eduardo Terán/ EL COMERCIO
Un grupo de repartidores a domicilio realizó una caravana de protesta la mañana de este lunes 24 de agosto del 2020 en Quito. Alrededor de 100 motociclistas partieron desde la Plataforma Financiera (norte) con dirección a las inmediaciones de la Asamblea Nacional, en el centro de la urbe.
Los trabajadores reclaman por un “pago justo” y mayor seguridad sanitaria para ejercer su labor. July Ramírez, dirigente del sindicato de repartidores, indicó que cada persona labora más de 10 horas diarias, siete días a la semana, en condiciones precarias. “Gastamos más de USD 200 mensuales en mantenimiento de los vehículos y combustibles”, señaló.
Piden que se restituya la tarifa base de un dólar y treinta centavos de kilometraje con la que trabajaron hasta noviembre del año pasado. La queja de la gente es que sus ingresos se han reducido considerablemente y no les alcanza para mantener a sus familias.
También aseguran que diariamente se exponen a accidentes mientras reparten los productos.