Este juego favorece la comunicación verbal o lingüística en el colectivo. Además, aplica en el estudiante la función lúdica y creativa del lenguaje. Por otro lado, este juego desarrolla la creatividad también para el interrogador.
Procedimiento
– Los estudiantes de la clase se reparten en dos grupos. Cada grupo elige alternativamente un representante.
– Un estudiante debe cronometrar el juego con un reloj.
– El profesor, y luego un estudiante, inicia una serie de preguntas. El interpelado debe cuidarse de decir ¡no! En lugar de ello puede decir: ‘negativo’, ‘falso’, ‘jamás’ u otra expresión equivalente. Ejemplos de estas preguntas son: ¿naciste en China?, ¿eres viudo?, ¿te gusta comer cebollas?, ¿eres hincha de Emelec?
– El alumno que logre mantener el diálogo durante un minuto, sin equivocarse, gana un punto para su equipo.