Procesión Jesús del Gran Poder, en Quito, el 25 de marzo del 2016. Foto: Julio Estrella/ EL COMERCIO
La procesión Jesús del Gran Poder finalizó en el mismo sitio desde donde partió: la Plaza San Francisco. Alrededor de 250 000 personas se reunieron la mañana y tarde de hoy, 25 de marzo, en el Centro Histórico para ser parte de este ritual de Semana Santa.
Una banda de pueblo, seguida por los tradicionales cucuruchos fueron quienes encabezaron la caminata durante todo el trayecto. Algunos llevaban carteles pidiendo por la salud de un familiar, mientras que otros cargaban rosarios, crucifijos e imágenes religiosas.
María del Carmen Rodríguez, una de las feligreses, cuenta que asiste a este encuentro todos los años para continuar reafirmando su fe en Dios. Solo ha faltado en dos ocasiones, porque estaba enferma, se justifica. Desde muy temprano acudió a la calle Venezuela para encontrar un sitio donde poner su banca y esperar a que llegue la imagen de Jesús.
Esta llegó pasadas las 12:00, mientras todos aguardaban ansiosos por su llegada. Una vez que empezó a recorrer las calles del centro histórico, cada vez más seguidores se sumaban a la caminata. Los empujones se hicieron constantes, ya que nadie quería perder su puesto ni la oportunidad de estar cerca de la imagen.
A las 16:00 finalizó la llegada de todos los miembros de la procesión. Aunque hubo una gran aglomeración de personas, según personal de la Cruz Roja, no se registró heridos o disturbios, solo víctimas de deshidratación por el exceso de calor. Estas personas fueron atendidas inmediatamente en las calles aledañas a la caminata.
Ambas procesiones de Jesús del Gran Poder contaron con la presencia de 5 607 servidores municipales, entre agentes de la Policía Metropolitana, Cuerpo de Bomberos Quito, Coe metropolitano, administraciones zonales y empresas del municipio. Además, 15 cámaras monitorearon estas zonas y se contó con 14 ambulancias.
En 5 607 servidores municipales y apoyados con 15 cámaras y 14 ambulancias. La restricción vehicular se realizó de acuerdo al paso de los feligreses.